García Vargas anuncia que se van a limitar las prestaciones sanitarias

Julián García Vargas, ministro de Sanidad y Consumo, anunció ayer que se va a limitar el acceso a los hospitales públicos según el tipo de patologías. Tras la universalización de la asistencia, aprobada el viernes pasado por el Consejo de Ministros, es obvio, según el titular de Sanidad, que "no se puede dar todo tipo de prestaciones a todo el mundo. Se está llegando al límite de los recursos que se pueden dedicar a sanidad y, por tanto, hay que establecer prioridades". García Vargas se negó a concretar qué tipo de atención será prioritaria, aduciendo que "corresponde a los profesionales decidir qué se va a poder curar en un hospital y qué fuera de él".

Para García Vargas, el control del gasto sanitario, que se ha disparado los últimos años con la irrupción de las nuevas tecnologías y el aumento de la esperanza de vida, es el principal reto que tiene planteada la sanidad en estos momentos. Lo que no quiso aclarar el ministro de Sanidad y Consumo -"no es momento para hacer este tipo de declaraciones"- fue apuntado por su brazo ejecutor al frente del Instituto Nacional de la Salud (Insalud), Eduardo Arrojo, al hacer una mención expresa a la fertilización in vitro como una de las prestaciones "que hay que decidir qué se hace con ella". Con respecto a la atención bucodental, la decisión, para Arrojo, ya está tomada: "Resulta carísimo, y es un tema no prioritario porque una dentadura en mal estado no pone en peligro la vida de la persona". Otro campo a debatir, según varias fuentes, son algunos tipos de trasplantes muy costosos y con un bajo índice de éxitos.De hecho, según Arrojo, se trata simplemente de clarificar la situación. "Ahora mismo se están dando prioridades, el médico decide qué enfermo entra en un programa de trasplante, a quién se le da fertilización in vitro o qué paciente es operado en un hospital de otro país, pero existe la ilusión de que las prestaciones son ¡limitadas. Tiene que haber un debate social para establecer una lista de prioridades y que no sea sólo el médico el que decida". El presidente del Insalud anunció la creación de una oficina de innovación tecnológica encargada de "evaluar cómo se usan esos medios".

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