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Tribuna:DEBATE SOBRE EL ENVEJECIMIENTO DE LA POBLACIÓN
Tribuna
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La familia hace crisis

En las últimas semanas se han publicado con insistencia noticias que hacen reflexionar. Entre otras, el Frankfurter Allgemeine Zeitung dice que lo que más llama la atención a los extranjeros que visitan Alemania es la cara de descontento de la gente, la escasez de niños y una población envejecida; el Instituto de Estadística informa que se ha producido un descenso acusado en los índices de nupcialidad y fecundidad. Y en Estados Unidos, revela un reciente estudio, la causa principal de la regresión social y económica se debe a la desintegración de la familia, resultando inútiles las leyes para erradicar las bolsas de pobreza, ya que ésta depende del comportamiento social, y es la familia el principal conducto por el que éste se transmite. Por lo que, concluye, la desintegración familiar es una de las principales causas de pobreza.En 1988, el 24% de los 63 millones de niños norteamericanos vivían con un solo padre, porcentaje que duplica al de 1970. Y el 55% de -estos hogares se sitúa en los mínimos del nivel de pobreza. Sólo el 40% de los niños nacidos en 1988 vivirán con sus padres hasta los 18 años.

Se acepta comúnmente hoy que la crisis de la familia tiene graves consecuencias políticas, sociales y económicas.

La unidad familiar es la primera escuela de la vida para los seres humanos. La enseñanza y la educación son un complemento importante, siempre en relación con la vida familiar. En ella se desarrollan las virtudes humanas básicas: la libertad, la tolerancia, la justicia, el orden y la participación. Se aprende la evolución y el progreso, tanto en los estados biológicos como en los estados de ánimo.

El sentido del progreso no se podrá entender bien si no se ha luchado desde la infancia y en la adolescencia en el seno familiar, combatiendo las múltiples dificultades de cada día. Sólo así se aprende a vivir esta disposición de avanzar y mejorar en solidaridad con los demás.Núcleo económicoLa familia es el núcleo más adecuado para crear trabajo y producir bienestar económico. Aparte de ser conocidos los numerosos ejemplos de empresas importantes que nacieron y se mantienen mientras existe la unidad familiar, es mucho más elevado el número de familias que promueven miles y miles de pequeñas y medianas empresas y millones de puestos de trabajo, constituyendo el ejemplo vivo dela defensa de la libertad y de la competencia en un sistema democrático y de economía social de mercado.

Dentro de la estructura familiar nacen y se arraigan los hábitos democráticos. Sus miembros, tan diferentes entre sí, libres e independientes, deben recurrir frecuentemente al diálogo, al acuerdo, a la transaccíón o a la transigencia, a veces con autoridad y energía, estableciendo un marco de equilibrio y contrapesos eficaces. Se aprende a ganar y a perder, sin aplastar, a imponerse por la razón, y a veces por la fuerza, cediendo y recogiendo, dentro de inevitables límites de convivencia.

Después de la primera guerra mundial, un gran número de niños alemanes huérfanos fueron educados al margen de la familia. Más tarde, éstos influyeron decisivamente en la llegada de Hifler al poder, a la búsqueda de un liderazgo paternalista.

En las recientes elecciones al Parlamento Europeo se observa con preocupación el aumento espectacular de los extremismos, neonazis, verdes y grupos marginales, en perjuicio de los grandes partidos que constituyeron la Europa contemporánea. A nadie se le oculta que en este continente es donde con más fuerza se deja sentir la crisis.

Hijos clandestinos

La familia es el único grupo social capaz de luchar naturalmente, por sí misma, contra la coacción y la tiranía, y tiene capacidad para defenderse de la presión y de la intromisión en los valores de su intimidad. No es casualidad que en China hayan nacido millones de hijos clandestinos, desobedeciendo la imposición política del hijo

único, y sus consecuencias se empiezan a notar.

Hoy se está revisando el concepto jurídico de familia a partir de nuevas formas de matrimonio y filiación, haciéndose una adaptación de las distintas situaciones e intereses personales.Los conceptos de familia, matrimonio e hijos, que forman ¡in todo inseparable, se están distanciando cada vez más. Con el empeño en elevar a categoría el caso particular y basar la legislación general en intentar definir, proteger y dar estabilidad a cada una de las diferentes situaciones que se producen en la vida, se provocan contradicciones jurídicas, se causa un serio perjuicio a la persona y se distorsiona la estructura social. Aunque sea obligado buscar soluciones a las situaciones excepcionales.

Pero es lamentable que en España continuemos estando retrasados con respecto a los dernás países occidentales. Mientras en éstos el concubinato tiende a decrecer, aumenta el número de matrimonios entre jóvenes, comienzan a surgir cada vez más defensores de la familia, se realiza una política más equitativa y se contribuye a crear un clima favorable para la familia, entre nosotros se alienta de modo suicida todo lo contrario.

En cambio, si de verdad se aspira a una sociedad progresista y de vanguardia; si la legislación trata de crear y ordenar el futuro, en lugar de ir a remolque de las circunstancias; si es cierto que todos descan sinceramente vivir las libertades reales y la democracia efectiva, ha de procurarse por todos los medios que la enfermedad que aqueja a la fárnilia se supere mediante una crisis favorable para evitar una ruptura entre generaciones.Bias Camacho Zancada ha sido díputado del Partido Popular en la última legislatura.

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