Un hombre apuñala a seis personas sin mediar palabra en diversas calles de Carabanchel y Los Cármenes
Unos 200 policías están dedicados a la busca y captura de un hombre que durante la madrugada y la mañana de ayer apuñaló sin mediar palabra a seis personas en los barrios de Carabanchel y Los Cármenes, en Madrid. El agresor aparenta unos 30 años y tiene una serpiente tatuada en el brazo derecho. Actuó por última vez sobre las diez de la mañana, cuando acuchilló al conductor de una furgoneta, muy cerca de unas oficinas policiales.
Benito Rodríguez Muñoz, que se dirigía a las dos de la madrugada a su puesto de trabajo, fue apuñalado en el pecho cuando iba a entrar en la estación de metro de Laguna. Unos diez minutos después, Augusto Acosta García, de 22 años, que trabaja como tapicero en la empresa Talbot, recibió varios pinchazos en el momento en que abría el portal de su domicilio de la calle de Almazán, número 26. Acosta regresaba a su casa en su motocicleta desde la zona de Moncloa, después de visitar a su novia.
A, las 2.20 de la madrugada, Lucas Ramos Fernández recibió un navajazo en la región lumbar cuando estaba barriendo el suelo del bar donde trabaja, en el número 147 del paseo de Extrema dura..
Agentes de la comisaría del distrito de Los Cármenes se movilizaron rápidamente, al tener conocimiento de que un mismo individuo era el autor de las tres agresiones registradas en su demarcación en tan breve espacio de tiempo. Alguna de las víctimas pudo indicar a los policías que su atacante es un hombre que aparenta entre 30 y 32 años de edad., de 1,80 metros de estatura, de cara rectangular y con el pelo negro y peinado hacia atrás.
El enloquecido agresor descansó durante unas horas y de nuevo volvió a actuar sobre las 8.10 de la mañana, cuando acuchilló al joven Alberto Grande Moral, de 17 años, en la calle de Carlos Dabán, en el distrito de Carabanchel.. Unos diez minutos más tarde, el. desconocido perpetró su quinta agresión, en esta ocasión contra Juan Jiménez Ponce, de 45 años, en el parque de San Isidro.
El loco de estilete, como empezó a denominarle la policía, acuchilló un par de horas después a Marcial Ávila García, de 45 años, en el momento en que éste se hallaba detenido ante un semáforo de la calle de Gallur, a unos metros de las dependencias policiales de la plaza de Los Cármenes, donde se tramita la renovación del carné de identidad. Ávila, que se hallaba al volante de una furgoneta Nissan Vanette, recibió tres o cuatro pinchazos en el pecho, uno de ellos muy cerca delcorazón.
Tatuaje
Augusto Acosta García, el segundo de los apuñalados, logró subir hasta su domicilio y pedir ayuda a su amigo Enrique González Crespo. La novia de éste recordaba así ese momento horas después: "Nos dijo que le había acuchillado un tio sin el menor motivo. No, nos lo podíamos creer y yo pensé en principio que quien le pinchó había sido alguien que había querido robarle la moto".
Los tres últimos agredidos se encuentran internados en el hospital provincial Gregorio Marañón, mientras que los demás están en el hospital clínico de San Carlos y en el Doce de Octubre. La gravedad de las heridas de cada una de las víctimas es muy diversa, aunque no parece que la vida de ninguna de ellas corra peligro.
La Jefatura Superior de Policía de Madrid ordenó una operación encaminada a la identificación y detención del misterioso agresor. En el dispositivo tomaron parte no sólo agentes de las comisarías de Los Cármenes y Carabanchel -distritos, en los que había actuado el delincuente- sino también de otras unidades.
Motoristas del Cuerpo Nacional de Policía y radiopatrullas rastrearon la zona del Cerro de la Mica y Caño Roto, donde hay numerosas chabolas ocupadas por marginados y drogadictos.
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