Los supervivientes del ametrallamiento marroquí, niegan que traficaran con drogas

Los dos tripulantes de la barcaza Mi Esperanza que sobrevieron al ametrallamiento realizado en la noche del jueves por una patrullera marroquí negaron ayer a la policía del país magrebí que esta embarcación se dedicara al tráfico de drogas entre las costas de España y de Marruecos, según informaron fuentes diplomáticas españolas en Rabat. En el incidente resultó muerto Tomás Gómez Guerrero, de 38 años de edad, casado y con cuatro hijos, y herido Juan Rodríguez Sedeño, mientras que el tercer tripulante, Juan Antonio Rico, fue detenido.

Fuentes diplomáticas españolas en Marruecos señalaron ayer que la Embajada espera recibir mañana de las autoridades marroquíes las diligencias realizadas por la Gendarmería Real sobre el incidente de la barcaza española. En el atestado policial marroquí se incluyen las declaraciones de los dos pescadores supervivientes: José Antonio Rico y el herido Juan Rodríguez Sedeño. Según las fuentes mencionadas, ambos han negado a la Gendarmería Real marroquí estar implicados en tráfico de drogas.La Gendarmería Real entregará también a las autoridades judiciales marroquíes el próximo martes las diligencias abiertas por el caso, informa Efe.

José Antonio Rico, quien permanece detenido en un cuartel de Tetuán, declaró a los funcionarios del Consulado español en esa ciudad que le visitaron, que no había recibido malos tratos de los agentes marroquíes y que se encontraba en buen estado. Familiares de Rico que han viajado a Marruecos tras conocer los hechos, pudieron visitar ayer al detenido. Juan Rodríguez Sedeño, herido en el incidente, evoluciona favorablemente, tras ser operado en el hospital Cortobis de Tanger de una fractura en su hombro izquierdo.

El pescador herido declaró a este periódico que "a eso de las cinco y pico de la mañana [del jueves] la patrullera marroquí nos echó el foco. Entonces Tomás, que iba fuera de la cabina, aceleró porque estaba aturdido. Y no lo pensaron dos veces. Soltaron una ráfaga de cuatro o cinco tiros. Tiraron a matar. Yo reduje la velocidad, pero era demasiado tarde y a él le metieron un disparo en un ojo y otro en el cuello. Cayó hacia atrás". La Embajada española en Rabat ha iniciado los trámites para la repatriación del cadáver de Tomás Gómez Guerrero, el marinero fallecido en el incidente con la patrullera marroquí.

Barca prestada

Diego González Sedeño, propietario de la barcaza Mi Esperanza, negó ayer a diversos medios de comunicación que esta embarcación se dedicara al tráfico de estupefacientes. El propietario de la barcaza en declaraciones a Radio SER-La Línea, afirmó ayer que había prestado la barca, de seis metros de eslora y con un motor con cuatro caballos de potencia, a Juan Rodríguez Sedeño, cuñado suyo, de 40 años y padre de cinco hijos, y a Juan Antonio Rico, casado con una de sus hijas."Mi cuñado tiene una barquita que estaba averiada y me dijo que se la prestara para pescar almejas, aunque yo sé que está la veda echada y no se puede, pero mejor es vivir de eso que de ná", dijo Diego González Sedeño. Informa Lourdes Lucio.

Al parecer, los tres tripulantes salieron a navegar sobre las tres de la madrugada, hora que, según un portavoz de la Ayudantía de Marina de la Línea, "no es extraña, porque los marineros van buscando las mareas". González Sedeño avisó a la Ayudantía de Marina a las 16.30 horas del jueves de la tardanza en el regreso de la barcaza, e inmediatamente se procedió en su búsqueda, según manifestó el citado portavoz.

La barca Mi Esperanza, con matrícula de Algeciras-21525 y con base en La Línea, fue adquirida por Diego González hace dos años y llevaba casi un año sin salir a la mar. "Esta es la primera vez y menos lo hará a partir de ahora. Nosotros no sabemos nada, sólo lo que dice la Prensa, que es mentira, porque mi barca nunca ha traido droga ni nada de eso".

Despistados por el eclipse

Tanto González Sedeño como una familiar del tripulante que resultó herido sostienen que los ocupantes de la barca se "despistaron" con el eclipse de luna que se produjo en la madrugada del pasado jueves, "y navegando se metieron en la costa de Marruecos'.Pescadores que faenan en las mismas costas han dado una versión diferente a la de los supervivientes y a la del dueño de Mi Esperanza, y han indicado que esa barcaza era conocida en la zona por los numerosos viajes clandestinos que realizaban entre la costa española y marroquí.

El encargado de negocios de la Embajada de Marruecos en Madrid, quien fue recibido el viernes por el ministro de Asuntos Exteriores español, Francisco Fernández Ordóñez, prometió a éste que se entregaría a las autoridades españolas un informe con la relación de los hechos.