Jim Kerr: "Nuestra música no puede desentenderse de la política actual"
Junto a su grupo, Simple Minds, el cantante escocés actúa hoy en Madrid
El grupo escocés Simple Minds presenta esta noche en Madrid su último disco, Street fighting years, en un macroconcierto en el que también estarán Lou Reed, The Silencers y el grupo español Alicia en las Ciudades. El líder de la banda, Jim Kerr, se muestra orgulloso por actuar después del neoyorquino, a quien considera "un maestro, tanto a nivel musical como por sus textos; vamos a hablar con él para hacer algunas canciones juntos". Muy comprometido social y políticamente, Kerr afirmó: "Nuestra música no puede desentenderse de la política actual".
"Hace unos días, un periodista británico nos acusaba de hablar del apartheid surafricano, de la pena de muerte y de otros temas que, según él, son de sobra conocidos por todos. En un momento en que en Suráfrica está muriendo más gente que nunca a manos de la policía y en Estados Unidos vuelven a electrocutar a niños, le guste o no a la Prensa, vamos a seguir informando. Nuestra música no puede desentenderse de la política, no puede ignorar la realidad", afirma con firmeza y serenidad Jim Kerr, líder de unos Simple Minds que, después de tres años de inactividad, actúan hoy en Madrid y el próximo día 11 en Barcelona.El cantante escocés, enfundado en unos vaqueros negros y con una camiseta de Amnistía Internacional, esperaba en un céntrico hotel madrileño la entrega del disco de oro (50.000 ejemplares vendidos) por su último álbum, Street fighting years. Después de algunos altibajos creativos, Simple Minds se han colocado de nuevo en la primera línea del pop-rock mundial tras los cambios musicales de la banda. "Nos gustaría pensar que siempre tenemos los ojos y los oídos muy abiertos a todo lo que sea novedoso", dice, "pero no nos gustaría tanto ser como esos viejos profesores sabelotodo que experimentan por el mero hecho de experimentar. Estamos abiertos a todo tipo de ideas, pero no vamos a buscarlas desesperadamente". La conversación con Jim Kerr se deriva rápidamente hacia la actualidad política y social. Él fue uno de los impulsores del concierto homenaje a Nelson Mandela, y desde entonces no ha dejado de apoyar todo tipo de acciones contra la opresión y el racismo, pese a los comentarios de determinados sectores de la Prensa británica y norteamericana.
Ejemplo de manipulación
"Desde el Reino Unido y Estados Unidos es muy difícil luchar contra las injusticias", afirma sin dudar un segundo. "Estos países odian a los cantantes con ideas políticas, y un ejemplo claro de manipulación es lo que hicieron con Bruce Springsteen. Cuando se editó el tema Born in the USA, una canción muy dura sobre los veteranos de Vietnam y sus miserias, la gente trató de convertirla en un himno republicano, algo totalmente incomprensible. Estados Unidos es horrible a estos niveles; el Reino Unido, simplemente muy malo, y el resto de Europa, una maravilla. Fuera de estos dos países todo cambia y el público y los medios apoyan incondicionalmente a los grupos y cantantes que mantienen un compromiso social y político serio".
La efectividad de la música pop como arma para luchar contra las injusticias es, según Kerr, muy grande. Su misión es informar, denunciar los hechos aprovechando la repercusión de discos y conciertos. "Los políticos son los únicos que tienen la llave para cambiar las cosas, eso hay que tenerlo muy claro, y los músicos sólo tenemos la posibilidad de luchar contra la ignorancia del pueblo, de la gente de la calle. Y ellos son los que deben y pueden obligar al político a que coja la llave", asegura el cantante y compositor escocés. "Nuestra misión es concienciar, obligar a dar un primer paso. Debemos tener en cuenta que el mundo es un lugar pequeño y que lo único que importa al político y al hombre de negocios es el dinero. Así, si la gente boicotea a las empresas que colaboran con los países dictatoriales, envenenando sus productos o, simplemente, no consumiéndolos, va a conseguir que cambien de opinión y de forma de actuar. Estas formas de presión son las realmente efectivas en la lucha por los derechos humanos, por la libertad, por la ecología...".
En su segunda actuación en Madrid los Simple Minds tienen dos acompañantes de lujo. Por un lado, The Silencers, también escoceses y vecinos y muy amigos de Jim Kerr, y por otro, una gran estrella, el neoyorquino Lou Reed. Kerr se deshace en elogios hacia él, agradeciéndole su colaboración vocal en el tema This is your land: "Hablar de Lou Reed como telonero es como colocar a Marlon Brando de cuarto actor en una película de serie B. Es una superestrella, un maestro en el que fijarse a la hora de escribir músicas y textos. Voy a hablar con él cuando finalice su concierto para ver si le apetece subir a escena con nosotros y hacer un par de canciones. Le conozco bien, y si está satisfecho de su actuación, seguro que cantamos juntos".
Babelia
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