Problemas de financiación en Yugoslavia ante la 'cumbre' de los 'no alineados'
Belgrado se está preparando a toda velocidad para dar la bienvenida a los 102 jefes de Estado que acudirán a la capital yugoslava del 4 al 7 de septiembre para participar en la novena cumbre de los países no alineados. Se construyen hoteles de lujo, se modernizan las telecomunicaciones y el aeropuerto, se renueva la ciudad universitaria y otros edificios, se remozan las fachadas, se abren restaurantes nuevos ... Faltando sólo tres meses para la celebración del evento, la revista Danas sostiene que la financiación de los 60 proyectos costosos, emprendidos para satisfacer las necesidades de la cumbre, no está totalmente cubierta.Cuánto costará y quién pagará los preparativos para la reunión internacional es una incógnita para la opinión pública yugoslava. Por ejemplo, los residentes de Serbia (cuya capital es Belgrado) llevan varios meses pagando los servicios telefónicos un 30% más caros que el resto del país para financiar la modernización del sistema de las telecomunicaciones.
Pese a la penuria por la que está atravesando el país balcánico, los no alineados pasarán unos días a todo lujo, según se prevé, por la lista de productos a importar, preparada por el Gobierno, por un valor de 83 millones de dólares (unos 10.000 millones de pesetas) sin pagar los derechos aduaneros. La lista incluye, entre otras cosas, los siguientes artículos: 15.000 cubiertos de plata, 11.000 platos de porcelana, miles de vasos y tazas, cuartos de baño completos, un telescopio, cinco pianos, miles de metros cuadrados de tela y alfombras, cintas adhesivas, electrodomésticos, ordenadores y equipos de telecomunicaciones.
Hubo sólo un inconveniente en los preparativos: la asamblea federal rechazó aprobar la lista en tres ocasiones, pues las empresas yugoslavas no sólo producen la mayoría de los artículos sino que los exportan. El Gobierno se vio obligado a revisar la relación, pues no contaba con los delegados rebeldes, que ya no estaban dispuestos a tolerar el derroche.
Al mismo tiempo es necesario calmar los ánimos de los países no alineados, algunos abiertamente molestos por los escritos poco favorables al movimiento en la Prensa yugoslava.
Desde la reunión de los ministros de Exteriores de los países no alineados celebrada en septiembre pasado en Chipre, donde Yugoslavia fue designada sede de la próxima cumbre, la discusión no ha cesado -entre los intelectuales, movimientos alternativos, la juventud y la Prensa- en torno a la redefinición de la política exterior yugoslava y un mayor acercamiento a Europa occidental.
