Puntualizaciones sobre 'Crimen, SA'
En su editorial Crimen, SA, publicado el 27 de junio, que comenta el artículo del mismo día sobre la operación inmobiliaria de Melcheso, SA, hacen unos comentarios y se adelantan juicios de valor que resultan a la luz de los hechos ciertamente graves y carente de fundamento. Quisiera puntualizar lo siguiente:Primero. Nuestro despacho de Londres fue requerido por unos abogados ingleses para que formalizara determinadas inversiones en España de acuerdo con la ley española. Es absolutamente impensable que un abogado exija a otro que desvele la identidad de su cliente, hecho éste amparado además por el secreto profesional, que ustedes, como periodistas, deben valorar en su justa medida. En ningún caso supimos qué intereses defendían estos abogados ni tampoco se observó en ningún momento detalle alguno que despertara nuestra inquietud o nos hiciera pensar en la ilegalidad de la procedencia de los fondos.
A la vista de estos hechos (que ustedes conocían), ¿cómo pueden juzgar nuestra actuación?
Segundo. En nuestro bufete, como cualquiera de los otros muchos que asesoran a inversores extranjeros en el sector inmobiliario en España, no preparamos una ficha de los antecedentes de los inversores ni exigimos un cuestionario sobre la conducta de los mismos. Nuetra función, como la de las instituciones bancarias que intervienen, es la de asegurarnos que la estructura jurídico-administrativa de la operación es correcta y que los fondos cumplen con los requisitos de inversión extranjera en España.
Tercero. Por otra parte, la noticia tan exhaustiva en cuanto a los hechos y volátil en cuanto a los comentarios sobre nuestra conducta profesional ha omitido alguno de ellos. Por ejemplo, que la Brigada del Fraude, adscrita a Scotland Yard, recibió de nuestros despachos en Londres y Marbella toda la colaboración solicitada y se les entregó el dossier de la operación para que en el proceso judicial que se ventiló en Inglaterra pudieran elucidarse las responsabilidades. Resulta curioso y paradójico que mientras su periódico decide que la conducta de los profesionales implicados no resulta justificable, la policía británica nos da las gracias por nuestra modesta ayuda en este caso.
Cuarto. Deberían meditar ustedes sobre la gravedad de sus juicios, que en el caso nuestro han causado, además de serios perjuicios a nuestra firma de abogados, gran confusión entre los clientes. En cualquier caso, nos reservamos las acciones judiciales que procedan en defensa de nuestros intereses, que consideramos seriamente lesionados.-
Abogado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.