El ministro del Interior polaco, propuesto como candidato a la presidencia

PIOTR ADAMSKI, Después de 10 horas de intensos debates, el Comité Central del POUP (comunista) finalizó ayer su reunión a puerta cerrada sin elegir a su candidato al nuevo cargo de presidente de Polonia. La noticia más espectacular de la reunión ha sido la inesperada retirada de su candidatura por el jefe del partido, general Wojciech Jarazelski, quien al mismo tiempo propuso para la presidencia del Estado polaco al ministro del Interior, el también general Czeslaw Kiszczak.

La decisión de Jaruzelski ha sido desobedecida por el Comité Central y el grupo parlamentario del POUP, invitado a los debates, que pidieron en sendas declaraciones que Jaruzelski reconsiderara su postura y aplazaron la toma de la decisión definitiva hasta la semana próxima.Según el portavoz del Comité Central del POUP, Jan Bisztyga, la decisión de presentar o no su candidatura la tomará Jaruzelski en cuanto tenga la certeza de ser elegido como presidente. Según Bisztyga, los partidos aliados del POUP no han asegurado de momento que todos los diputados, sin cuyo apoyo el POUP no tiene la mayoría de la Asamblea nacional que elegirá al futuro presidente, votarán a Jaruzelski. "De momento", dijo Bisztyga, "hay dos candidaturas: la de Jaruzelski y la de Kiszczak".

La decisión de jaruzelski parece haber sorprendido a los miembros del Comité Central La reunión, celebrada a puerta cerrada, duró desde las diez de la mañana hasta las ocho de la tarde. En la primera parte del encuentro, Jaruzelski declaró que su apertura a las reformas no ha sido "un argumento suficiente para ganar un verdadero apoyo social, indispensable en la actual situación".

"Después de haberlo pensado profundamente, quiero afirmar que no presentaré mi candidatura a la presidencia de la República Popular de Polonia", dijo Jaruzelski, argumentando que no quería convertirse en un obstáculo en el camino del entendimiento nacional. "La opinión pública me asocia más con la ley marcial que con la línea de reformas", aclaró. Pero, añadió, "la sociedad siempre es justa, aunque no siempre con sus contemporáneos". El punto de vista de la opinión pública polaca aludida por Jaruzelski, no lo compartieron ayer el Comité Central ni el grupo parlamentario del POUP, que ven en el general Jaruzelski, sobre todo, al artífice del actual proceso democrático.

La candidatura de un representante del POUP será estudiada la semana próxima por la Asamblea nacional polaca, elegida los pasados días 4 y 18 de junio. Gracias a los anteriores acuerdos con la oposición del partido comunista y sus aliados, a los que en los recientes comicios votó un 25%. del electorado polaco, disponen de la mayoría del 54% en la Asamblea nacional. No obstante, tal y como lo ha señalado el portavoz del POUP, los partidos campesino y democrático, sin cuyo apoyo el POUP no tiene la mayoría en la Asamblea, no han logrado, de momento, obligar a sus diputados, los cuales han sido elegidos con apoyo de Solidaridad, a votar a Jaruzelski.

Postura de Solidaridad

En la decisión del general Jaruzelski ha influido también la postura del grupo parlamentario de Solidaridad, que ha decidido votar contra su candidatura. El jueves pasado, los diputados y senadores de Solidaridad determinaron no presentar ninguna candidatura propia a la presidencia del Estado y votar de acuerdo con la "voluntad de los electores", sentencia que sólo pudo interpretarse como un voto contra Jaruzelski.

El voto negativo de Solidaridad no podría por sí solo impedir la elección de Jaruzelski como presidente de Polonia, pero bastarían los votos de 22 diputados del partido campesino o del democrático para que la candidatura de Jaruzelski fuera rechazada.