Rodríguez Sahagún: "La vara de alcalde no es una varita mágica"

Agustín Rodríguez Sahagún no puede ocultar su satisfacción. Es el nuevo alcalde de Madrid. A lo largo de la entrevista hace continuas referencias a la colaboración entre centristas y populares, entre ciudadanos y Corporación. Procura evitar cualquier respuesta que suponga una crítica al anterior equipo de gobierno socialista y pide tiempo para hacer pública su postura ante temas concretos como el realojamiento de los vecinos del Pozo del Huevo o la construcción de un aparcamiento bajo la plaza de Oriente. Quiere ofrecer una imagen esperanzadora, aunque se muestra cauto en el anuncio de soluciones. Sabe que tiene menos de 24 meses para intentar dejar su huella en esta ciudad.

Pregunta. ¿Qué va a aportar el nuevo equipo de gobierno a los madrileños?Respuesta. Creo que vamos a traer una mayor eficacia en la gestión, una nueva ilusión para los madrileños para afrontar los problemas reales con soluciones no gastadas y un talante, unos modos de gobernar más dialogantes. Madrid es hoy una ciudad compleja, incómoda, colapsada, sucia e insegura, con graves problemas, derivados, por una parte, de ser una gran capital y, por otra, del tiempo que se ha tardado en afrontarlos. Se ha perdido tiempo y ha fallado la coordinación.

P. ¿Cuál es entonces la política que propone el nuevo equipo de gobierno?

R. La vara de alcalde no es una varita mágica que pueda resolver los problemas de un día para otro, pero se puede comenzar a aplicar soluciones. No grandes soluciones, que también serán afrontadas, sino pequeñas soluciones diarias que, coordinadas, alivien muchos de los problemas que sufren a diario los madrileños. El empeño es difícil porque el mandato es muy corto, pero estoy seguro que con esa atención diaria habrá ámbitos en que claramente se percibirán los resultados.

Cesiones

P. En esa gestión diaria, ¿qué partido deberá ceder más, el PP o el CDS?R. No es un problema de cesiones. Ya hay un acuerdo que está suscrito por todos los concejales de los dos grupos que representan a la mayoría de los madrileños. Hay un claro espíritu de colaboración. El nivel de compenetración al que he llegado con mi primer teniente de alcalde, José María Álvarez del Manzano, es muy grande. Existen unas responsabilidades claramente asignadas a los que se van a encargar de las diferentes áreas y vamos a realizar un esfuerzo especial para corregir la falta de coordinación que ha existido entre la gestión desarrollada por las diferentes áreas. Cuanto concierne a Circulación afecta a Urbanismo y a la Policía Municipal. Ésa será la tarea que desarrollarán los tenientes de alcalde bajo la coordinación general del primer teniente de alcalde.

Cerca del pueblo

P. ¿Cuál va a ser su papel como alcalde, el de gestor o el institucional?R. Tendré una parte activa en la gestión, sin olvidar que el alcalde tiene una parte institucional importante como representante de todos los madrileños. Quiero ser una persona que tienda a estar cerca del pueblo, a sentirse cerca de sus problemas, a fomentar la sensibilidad del aparato administrativo en su relación con el ciudadano. En este sentido quiero crear una oficina de protección al vecino que reciba sugerencias y protestas de los ciudadanos sobre el funcionamiento de la Administración. Es sorprendente el número de que jas razonadas que se reciben por culpa de esta sensibilidad. Los problemas de los vecinos de Madrid serán los míos; sus inquietudes, mis inquietudes. Mi sueño es recuperar, con la participación de todos, la convivencia para hacer de Madrid una ciudad más libre, más tranquila y más habitable, en la que las posibilidades de cultura, trabajo y ocio sean reales.

P. ¿Cómo defiende el hecho de que el alcalde pertenezca a un partido que en las últimas elecciones europeas ha tenido menos del 9% de los votos en Madrid capital?

R. La referencia no se puede hacer respecto a las europeas, sino sobre las elecciones municipales de 1987. La alcaldía está ahora sustentada por el apoyo de unos concejales que obtuvieron más de 800.000 votos frente a los 600.000 y pico que sustentaban al alcalde anterior. No hay que olvidar que en las últimas elecciones locales la entrada del CDS rompió la mayoría absoluta del PSOE. Además, este tipo de acuerdos son comunes y habituales en todos los países.

P. ¿Va a realizarse una política populista?

R. El equipo de gobierno que presido va a actuar desde principios de solidaridad, transparencia y rigor, sabiendo que habrá que tomar medidas que no son populares pero que son buenas para Madrid. Gobernar no es imponer ni mandar. Buscaremos la colaboración de los ciudadanos, apelaremos a su espíritu cívico porque no puede haber ciudadano sin ciudad. Intentaremos dar respuesta a los problemas que más preocupan a los vecinos.

Propuestas

P. ¿Cuáles son las primeras propuestas que se adoptarán?R. En Circulación, queremos introducir mejoras en el trazado de las calles mediante cirugía viaria y tenemos establecidas las intersecciones en las que es necesano incrementar la presencia de agentes de tráfico. Vamos a hacer una campaña choque de limpieza, pretendemos elaborar un plan ecológico de la villa de Madrid, abordaremos una campaña para aumentar la seguridad en los 1.000 edificios más concurridos de la capital y tendremos una especial preocupación por mejorar los equipamientos y atender las necesidades de los barrios periféricos. Si desde la oposición hemos conseguido que se multiplique el presupuesto para gastos sociales en temas como la prevención de la droga o ayudas familiares para comprar libros de texto, nos comprometemos a que lo social sea prioritario en nuestro programa de actuaciones y así se refleje en los próximos presupuestos. Mantendremos la presión fiscal y utilizaremos el patrimonio de suelo para luchar contra la especulación. Se llevará adelante además el plan de las 18.000 viviendas sociales, procurando adecuarlo a la demanda, y potenciaremos las viviendas de alquiler. En cuanto al tema de los accesos, habrá que ir a planteamientos más ambiciosos que los contemplados en los convenios entre el MOPU, la Comunidad y el Ayuntamiento. No podemos olvidar el papel clave que debe corresponderle a Madrid en el nuevo contexto internacional.