Consenso para aprobar en Madrid la primera fase de la unión monetaria
El presidente del Gobierno, Felipe González, explicó ayer al presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, las posibilidades de alcanzar un acuerdo sobre la primera fase de la unión monetaria en la cumbre de la CE que se celebrará el lunes y el martes próximos en Madrid. El Reino Unido estaría dispuesto a participar en esa primera fase de ensayo, siempre que la obligación automática de asumir las dos fases restantes quedara soslayada. Por el contrario, las perspectivas para una declaración vinculante sobre la Carta Social siguen hipotecadas por el veto británico.La entrevista entre Delors y González, celebrada en la Moncloa, tuvo por objeto ultimar la agenda de la cumbre después de la ronda de encuentros que el presidente español ha mantenido durante el último mes con sus colegas europeos.
El respaldo de Londres a experimentar tan sólo la unión monetaria supone una devaluación de las conclusiones del informe Delors. El propio presidente de la Comisión es reticente, en principio, a que se recorte un texto que obtuvo la unanimidad del comité de expertos, entre los que figuraban los gobernadores de los bancos centrales de los países comunitarios. La posición española es intentar alcanzar un compromiso que vaya más allá de la simple experiencia de la primera fase.
El ministro de Asuntos Exteriores británico, sir Geoffrey Howe, manifestó ayer en Londres la disposición de su Gobierno a aceptar esa fórmula de compromiso planteada por González. "Estamos dispuestos a poner en marcha la fase inicial del informe Delors", dijo.
Sobre la Carta Social Europea, la primera ministra británica, Margaret Thatcher, continúa irreductible. Su posición es que el proyecto contiene medidas que ningún país puede imponer a los demás.
González se comprometió ayer con la Confederación Europea de Sindicatos (CES) a impulsar el desarrollo jurídico de la Carta Social en la próxima cumbre de Madrid. Nicolás Redondo entiende que con ello "se ha superado la mera declaración solemne y se han asumido los criterios defendidos por la CES".
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