La dirección del PP exculpa a Rosendo Naseiro de las acusaciones de estar implicado en intentos de soborno

, Rosendo Naseiro, tesorero del Partido Popular (PP), de quien el empresario Gustavo Durán dijo que le había "encargado" comprar el apoyo de Nicolás Piñeiro (PRIM) a la moción de censura contra el presidente de la Comunidad de Madrid, el socialista Joaquín Leguina, afirmó ayer que no le importaría dejar la política, aunque no piensa hacerlo por el momento. Pese a que el PP se había comprometido a difundir ayer el resultado de la investigación interna sobre los supuestos intentos de soborno, Manuel Fraga se limitó a comunicar que ningún miembro de su partido ha intentado "comprar votos".

El presidente nacional del PP leyó en una conferencia de prensa ofrecida en Valencia una nota redactada por Félix Pastor Ridruejo, vicepresidente encargado de investigar posibles vinculaciones de miembros del PP en los presuntos intentos de soborno. En su escrito, Pastor anticipa que los datos reunidos "son más que suficientes para llegar a conclusiones definitivas". "Nadie ha realizado", según él, "actuaciones tendentes a la compra de votos de diputados de la Asamblea de Madrid".Este mensaje fue leído por Fraga en la reunión de la comisión permanente de la junta directiva nacional del PP, celebrada en un hotel de Valencia, lo que unido a un par de comentarios de otros dirigentes, fue suficiente para dar por discutido el asunto. La investigación realizada por Pastor será debatida, según Fraga, en una próxima reunión de la dirección del PP para dar tiempo a la redacción de un informe pormenorizado. El líder conservador comentó que en dicho informe "no habrá ningún hecho nuevo".

El papel de Durán

Fraga rehuyó entrar en precisiones sobre aspectos concretos motivados por las ofertas económicas de Gustavo Durán y comentó: "No tengo nada más que decir, salvo que de lo investigado no resulta eso sino todo lo contrario. Se ha dicho de forma inexacta que afirmamos que el señor Durán ha actuado por su cuenta, cuando lo cierto es que ni siquiera sabemos si ha actuado".

[El Grupo Socialista de la Asamblea de Madrid difundió ayer una nota en la que resta validez a la investigación del PP y asegura: "No parece apropiado que los posibles delincuentes decidan ellos mismos si son o no culpables"].

Pese a que Fraga manifestó ayer que ha sido el PSOE y no su partido quien ha quedado salpicado por las denuncias de supuestos sobornos -"el pueblo español no practica el juego infantil de chuparse el dedo", dijo-, dirigentes del PP consideran que su tesorero ha quedado muy dañado políticamente, con independencia de la falsedad de las acusaciones.

En una conversación informal, Naseiro comentó ayer: "No voy a dejar la política por el momento. Yo la dejaré cuando me dé la gana. Aunque me encontraran una foto, que no la van a encontrar, con Durán, no me importaría nada. Como no me importa dejar la política. Antes ocupaba un tercer o cuarto lugar, como colaborador. En un momento determinado, me pidieron que aceptara más responsabilidad. A lo mejor me he planteado... o no, en mi casa, que estoy haciendo el gilipollas".

Naseiro se refugió en que en su vida privada ve a quien le da la gana, para rehuir las preguntas directas sobre sus relaciones con Gustavo Durán. "Lo que sí puedo decir", manifestó, "es que yo no encargo nada a nadie. Lo que tengo que hacer lo suelo hacer yo".

[El PRIM difundió ayer una nota en la que replica las acusaciones que contrta el citado partido ha formulado el popular Alberto Ruiz-Gallardón, a quien tilda de "personajillo político" y pregunta "de dónde han procedido los miles de millones de pesetas" que ha gastado la refundada AP en sus 10 años de existencia].

Por otro lado, Manuel Fraga y Marcelino Oreja, primer candidato del PP en las elecciones al Parlamento europeo, reunieron ayer en un mitin celebrado en la plaza de toros de Valencia a unas 20.000 personas. Oreja afirmó que el director general de RTVE, Luis Solana, suspendió los debates previstos en Televisión Española entre los principales candidatos al Parlamento europeo "porque los socialistas han tenido miedo; miedo a perder los debates, miedo a la libertad y a la democracia". El acto, muy multitudinario, reunió tanto público como el conseguido por Felipe González en esta misma plaza al principio de esta campaña.