Olmos asegura que Gustavo Durán no tiene argumentos para defenderse

"La defensa de Gustavo Durán es la de quien no tiene nada que defender; sus argumentos no tienen pase", dijo ayer Miguel Ángel Olmos, diputado de Izquierda Unida (IU) en la Asamblea de Madrid, que rompió su silencio de los últimos días y salió al paso de las declaraciones del empresario Gustavo Durán. Éste ha negado la acusación de que intentó sobornar, al diputado para que votase a favor de la moción de censura del PP y el CDS contra el presidente socialista de la Comunidad de Madrid, Joaquín Leguina.Durán, por su parte, manifestó que se reunió con Miguel Ángel Olmos a petición de éste (véase EL PAÍS de ayer). "Yo no insistí en la cita, tal y como dice él", manifestó ayer Olmos. "Fue Durán quien llamó insistentemente por teléfono a mi casa y me pidió que nos viéramos. Yo sospechaba algo, pero no sabía de qué bando podía venir la oferta. Así que decidí contárselo a la gente de mi grupo y consultarlo con la abogada Cristina Almeida, quien me aconsejó que fuera a un notario para darle cuenta de la cita y que acudiera a la entrevista con Durán con una grabadora".

La cita fue el viernes al mediodía en unas oficinas de la calle de Zurbano. Olmos llevaba un microcasete oculto en el bolsillo interior de su americana. "Fueron unos pocos minutos que se me hicieron eternos. Yo he corrido dos veces la maratón pero jamás me he cansado tanto".

Tuteo

"Empezó diciéndome que le tuteara", recordó ayer Olmos. "Luego seguimos hablando de deporte y después vino todo lo demás, que si las empresas a la que representaba, que si el dinero... El sábado por la mañana nos presentamos en el juzgado con la grabación". Acompañaban la cinta fotocopias del acta de diputado de Olmos y de una tarjeta de visita de Durán, en la que figuraban los teléfonos de su casa y de su coche.

Cristina Almeida, que acompañó ayer a Miguel Angel Olmos en la conferencia de prensa que ofreció, afirmó que hoy se personará como acusación particular ante el Juzgado de Instrucción número 20 de Madrid.

Cristina Almeida aprovechó la ocasión para señalar: "Se está degenerando la actividad política", dijo, "y eso está bloqueando la ilusión de los españoles". Criticó el vacío legal que existe para hacer frente a hechos como éstos: "En este país no se tiene en cuenta que los diputados elegidos no son, de piedra, sino de carne, y que la carne a veces es débil".

Mientras, Miguel Ángel Olmos no acaba de encontrar una respuesta a lo ocurrido en los últimos días. "¿Por qué yo?", dijo ayer Olmos. "Hace dos semanas tuve que desmentir los rumores de mi paso al Grupo Mixto. Creo que este incidente ha servido para demostrar que soy un hombre de Izquierda Unida y, sobre todo, un hombre de izquierdas. No entiendo cómo se puede ir diciendo por ahí que voy a sumar mi voto al centro-derecha".