El ex dirigente de una compañía marítima en quiebra presidirá el Gobierno japonés

El próximo primer ministro de Japón puede ser Toshio Komoto, de 77 años, antiguo presidente de una compañía marítima en quiebra. Komoto accede al cargo por ser una figura totalmente limpia de los diversos escándalos que han alcanzado al partido gobernante, el Liberal Demócrata, y ante la negativa del anciano Masayoshi Ito para suceder a Noboru Takeshita, el primer ministro en funciones implicado en el escándalo financiero Recruit.Takeshit a ha anunciado su decisión de abandonar el Gobierno nipón después que se apruebe el presupuesto la próxima semana. Fuentes del Partido Liberal aseguran que Komoto "aparece como el único candidato al puesto de primer ministro por una simple eliminación de las otras personas que aspiran al puesto".

Komoto, quien es conocido con el apodo de Príncipe Serio, debido a su cara de jugador de póquer, es un político que no ha tenido problemas con ninguna de las diversas facciones del partido gobernante. Un destacado miembro del Partido Liberal asegura que "Komoto es el mejor candidato para todos".

Otros tres candidatos que pudieran disputarle la presidencia a Komoto están involucrados, de una u otra manera, en la política y escándalos de ex ministros como Nakasone o Takeshita. Pese al gran fiasco de Komoto como presidente de la compañía marítima Sanko, que constituyó en 1985 uno de los mayores casos de bancarrota en la industria japonesa, su imagen política no ha sido alcanzada ni por las querellas internas del partido ni por los sucesivos escándalos.

Los dirigentes liberales esperan resolver la crisis la próxima semana con el nombramiento del sustituto de Takeshita. A este respecto, en Tokio se comenta que grandes empresas y hombres de negocios presionan a los políticos para que terminen cuanto antes con este relativo vacío de poder.