Don Juan Carlos, el primer rey que habla en 78 años ante el Parlamento portugués

ENVIADO ESPECIAL, El rey Juan Carlos rompió ayer en Lisboa una fuerte tradición portuguesa, respetada escrupulosamente desde que en 1911 se proclamó oficialmente la República, y penetró en la sala de sesiones de la Asamblea Nacional para dirigir la palabra, en portugués, a los parlamentarios del país vecino, quienes le aplaudieron durante más de un minuto puestos en pie. El presidente portugués, Mario Soares, que el primer día de la visita no acudió a los actos oficiales por encontrarse enfermo, ayer pudo participar en el programa de la jornada.

Los reyes que en las últimas décadas han visitado Portugal y acudían a la Asamblea de la República debían limitarse a tomar la palabra en la sala Noble del Parlamento o en el Senado, Cámara ya inexistente, pero nunca en el hemiciclo de la Asamblea. La excepción con el rey de España fue posible gracias al acuerdo unánime adoptado por los dirigentes de los seis grupos parlamentarios portugueses, a propuesta del presidente de la Asamblea, Vitor Crespo.Don Juan Carlos consideró "un gran honor" hablar en la sala de sesiones, a la que ni siquiera accedió la reina de Inglaterra Isabel II en su visita de hace un año a Lisboa. En su discurso, el Rey destacó que los dos países deben aprovechar positivamente el hecho de compartir un mismo espacio geográfico, extremo que nunca debe convertirse en fuente de conflictos. En este sentido, recordó que en el pasado más reciente España y Portugal han experimentado un proceso político similar de democratización que les ha llevado a incorporarse a organizaciones internacionales como la CE. "La Comunidad Europea se ha hecho más rica y di versa con nosotros", señaló, "y quizá es del sur de donde le vienen a la CE los apoyos más decididos en favor de la construcción europea".

El Rey, quien insistió en que entre España y Portugal "no debe haber barreras que los se paren", se refirió al reciente contencioso, ya superado, sobre la aportación militar española a la OTAN y los consiguientes recelos portugueses ante la hipótesis de que unidades de Portugal pudieran estar bajo mando español. "En una organización multilateral de estas características hay siempre muchos intereses en juego y afloran especiales sensibilidades. España ha querido tener en cuenta unos y otros en relación con Portugal al definir su participación en la Alianza Altántica".

Olvidar reticencias

Don Juan Carlos insistió en la necesidad de olvidar viejas reticencias con frases como éstas: "Nuestras dos naciones no tienen ningún excusa para olvidarse la una de la otra". "La apertura entre los dos países se ha de hacer sobre la base del profundo respeto hacia la historia". "Frente a la desconfianza de algunos, España es hoy el más prometedor mercado para Portugal". "El pasado puede iluminar nuestras actividades actuales, pero no debería condicionarlas con imágenes amarillentas que carecen de sentido".

Previamente, el presidente del Parlamento expresó el sentimiento de honra y alegría que suponía la presencia en la Asamblea de doña Sofía y don Juan Carlos, a quien calificó de "inequívoco defensor de la democracia y la Constitución". Frente a quienes pretendieron interrumpir el proceso democrático español.

Crespo también destacó el papel de la comisión parlamentaria hispano-portuguesa que se reunió por primera vez e Lisboa el pasado diciembre y lo hará en Madrid el mes próximo.