Mal principio
El espectáculo es una idea de María Muñoz y Tyna Greystoke. Se busca esa idea a lo largo -muy largo- de los cuarenta y cinco minutos de espectáculo; no se encuentra. A no ser la de que una persona, sola en una habitación , hace gestos impensados, improvisados o juguetones, si es que tiene el temperamento para el juego que no parece ser el caso de María Muñoz, seca y de movimientos peristálticos. Esto no es ni siquiera una idea; pero no parece haber otra. La intención que se anuncia de juegos del presente y del pasado, de fantasías o evocaciones, no brota. No es danza. Ni bailarina ni actriz. Al ser esto como es, se la incluye en la clasificación de teatro, que ultimamente lo admite todo. Pero le cuesta más admitir esta especie de trabajo desangelado, desgraciado, ceñudo, con el que se ha inaugurado en el Círculo de Bellas Artes el Festival de Teatro Joven de 1989. Mal principio.