El Senado abrirá el debate de Ias 'leyes autonómicas'

Una comisión específica del Senado en la que estarán representados los Gobiernos regionales asumirá la función de estudiar con antelación toda ley propuesta por el Gobierno central que vaya a tener repercusión en alguna comunidad autónoma, de forma que en ese ámbito parlamentario se solventen las eventuales discrepancias, según se establece en el proyecto de reglamento de reforma del Senado, al que ha tenido acceso EL PAÍS. El texto será entregado esta semana a los portavoces parlamentarios. La Comisión de Autonomías tendrá como misión, por tanto, convertir al Senado en una verdadera Cámara de representación territorial, como fue definida en la Constitución.

Con la nueva reforma no desaparecen las funciones legislativas de esta Cámara, sino que convivirán "dos Cámaras en una". El texto que servirá de base para la forma del reglamento del Senado ha sido elaborado por los ministros para las Administraciones Públicas, Joaquín Almunia, y de Relaciones con las Cortes, Virgilio Zapatero, junto con el presidente del Grupo Socialista, Eduardo Martín Toval, y el portavoz en el Senado, Jaime Barreiro. El borrador será entregado en los próximos días a los portavoces parlamentarios.Los socialistas aseguran que su texto no tiene por qué ser el definitivo y dicen estar abiertos a cuantas sugerencias emita la oposición. El documento gubernamental consta de dos capítulos: justificación de la reforma del Senado español y contenido de la reforma, además de cuatro anexos con aspectos de organización.

"El Senado español", señala el texto, "no responde, ni en su forma ni en su función, a la evidente encomienda que se le hace en el precepto constitucional" [Cámara de representación territorial]. Ni siquiera la propia constitución atribuye a esta Cámara funciones específicas de iniciativa, coordinación o examen en materias provenientes o dirigidas hacia las comunidades autónomas", señala el documento. Los autores del texto consideran que se puede crear en el Senado, con el ánimo de precisar mejor su configuración como Cámara de representación territorial, un órgano de peculiar composición, que asuma funciones directamente conectadas con los problemas específicos de las comunidades autónomas y con la relación existente entre ellas, y la Administración central, "permitiendo incluso el pronunciamiento en propia voz de ambas Administraciones".

Composición

La composición de "la Comisión de Autonomías del Senado reformada" constará de 46 senadores designados por los Parlamentos autonómicos, 12 senadores propuestos por los grupos parlamentarios, 17 representantes de los consejos de Gobierno de las comunidades autónomas y "la representación del Gobierno de la nación".Los socialistas esperan que esta comisión para las comunidades autónomas sirva de órgano de consulta, previa a la preparación de una iniciativa parlamentaria o legislativa, por parte del Gobierno, acerca de su contenido o repercusión específicamente autonómicos.

El Gobierno recabará de esta comisión su postura en torno a los criterios para elaborar una norma o una actuación administrativa de su competencia que implique alguna repercusión autonómica, al objeto de prevenir las discrepancias y procurar la confluencia de criterios.

Los hechos demuestran que los Parlamentos y los Gobier nos autonómicos discrepan muy a menudo respecto de las normas de la Administración central, de ahí el considerable número de recursos de inconstitucionalidad o conflictos de competencias que se presentan contra actos de la Administración central.

Esta comisión tendría funciones legislativas; de control parlamentario de las actuaciones de la Administración central; de información, de propuesta, dictamen y seguimiento de la aplicación del Fondo de Compensanción Interterritorial; de sanción, de estudios y de colaboración.

Se pretende asimismo que este órgano sirva de mediador en las divergencias y conflictos entre fuerzas políticas y Administraciones.

Los autores del texto han establecido "una composición hipotética de la Comisión de Autonomías", de la siguiente manera: el Grupo Parlamentario Socialista, con la suma de senadores designados por las comunidades autónomas y los propuestos por los grupos parlamentarios, tendría 29 miembros; 13, el Grupo Parlamentario Popular; 5, centristas; 4, nacionalistas catalanes; 2, nacionalistas vascos, y 5 del Grupo Mixto. Además, los 17 representantes de los consejos de las comunidades autónomas y una representación del Gobierno central.