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El Gobierno italiano ofrecerá una "dote salarial" a los jóvenes en paro

Juan Arias

El ministro de Trabajo, Rino Formica, socialista y uno de los personajes de mayor prestigio de su partido, acaba de lanzar, para intentar resolver el grave problema del desempleo en el sur, una iniciativa considerada "revolucionaria" en este país. Prevé la concesión a cada joven sin trabajo de una "dote salarial" de 50.000 pesetas mensuales.No se trata, sin embargo, de una simple ayuda de desempleo, porque los jóvenes que deseen recibir dicha dote deberán aceptar algunas condiciones bien concretas. La solución Formica prevé tres posibilidades: la asistencia a cursos de "escuela-formación" para recuperar en primer lugar los bajos niveles escolares de muchos de dichos jóvenes del sur y para especializarles en los nuevos trabajos de la tecnología avanzada, o bien la inserción dentro de una empresa privada con un contrato temporal no menor de cinco años -la empresa tendrá el acicate de la "dote" que lleva el joven de 50.000 pesetas que la empresa podrá detraer de su sueldo-, y por último la posibilidad de un trabajo en las estructuras públicas del territorio.

Según Formica, el drama del desempleo en el sur del país es doble: primero, porque contribuye a mantener subdesarrollada a media Italia, y además porque toda esa masa de jóvenes sin trabajo es la mejor carne de cañón para las tres mafias: la siciliana, la calabresa y la napolitana.

Mercado del trabajo

Según el ministro socialista, el Mediodía "es la única área de economía avanzada en la cual la desocupación de largo período de los adultos iguala a la de los jóvenes", lo cual indica, subraya Formica, "un bloqueo del mercado del trabajo que está determinando reflejos muy graves sobre la composición, la cualidad y la capacidad trabajadora de una generación de jóvenes sin trabajo, privados de título de estudio o con un nivel bajísimo de preparación profesional". El círculo vicíoso debe romperse, según el ministro, y ello se puede lograr sólo "metiendo en el mercado del trabajo a toda esa masa de jóvenes desbandados, evitando que acaben favoreciendo fenómenos mafiosos de sustitución de los poderes del Estado".Para lograr la propuesta del ministro se van a crear, nombrados por su ministerio, una serie de comités, región por región, que redacten las listas de jóvenes candidatos a la "dote salarial".

Los requisitos fundamentales son los siguientes: una edad comprendida entre los 20 y los 29 años; que los jóvenes estén inscritos en las listas de desempleo por lo menos desde hace dos años, que hayan acabado la escuela obligatoria por lo menos desde hace dos años, que no estén inscritos en la universidad y que manifiesten la disponibilidad inmediata de empezar a participar a los cursos de formación o a trabajar en empresas públicas o privadas.

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