España no se plantea enviar observadores para vigilar el alto el fuego en Líbano
El Gobierno español acoge "con esperanza" la resolución adoptada el pasado jueves en Túnez por el consejo ministerial de la Liga de Estados Árabes en pro de un aIto el fuego inmediato en Líbano, así como la decisión de enviar un grupo de observadores que controlen sobre el terreno que éste se respeta. "Esta actitud", manifestaron ayer fuentes oficiales del Ministerio de Asuntos Exteriores, "no significa que España se haya planteado, ni que se vaya a plantear, enviar observadores".En la noche del viernes, una información facilitada por las mismas fuentes, y que se prestaba a confusión, fue interpretada como que España había adoptado la decisión de participar en el control efectivo del cese de las hostilidades.
El alto el fuego, que teóricanente entró en vigor al mediodía del pasado viernes, era seguido ayer con irregularidades, con algunos bombardeos aislados. Los los primeros ministros con que cuenta actualmente el país (el -cristiano Michel Aoun y el musulmán Salim Hoss) habían aceptado, en principio, la propuesta salida de la reunión de Túnez.
La cuestión del bloqueo de los puertos ilegales se presentaba como el principal punto de fricción entre los dos sectores enfrentados.
