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Maragall acusa a la Generalitat de entorpecer los proyectos de Barcelona 92

ENRIC JULIANA, El alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, acusó ayer al Gobierno de la Generalitat de falta de voluntad política para colaborar con los proyectos de la ciudad y de actuar sin espíritu constructivo. Como ejemplo, el alcalde afirmó que el Consell Executiu ha presionado a las empresas interesadas en contruir el metro de Montjtüc para que abandonen el proyecto. Maragall se mostró especialmente irritado por las críticas del conseller Joaquim Molins al plan de hoteles aprobado el miércoles por el pleno municipal con la oposición de nacionalistas y comunistas.

La dureza de las, palabras de Maragall en una conferencia de prensa pone en evidencia que las siempre díficiles relaciones entre el Gobierno de la Generalitat y el Ayuntamiento se hallan, otra vez, en los infiernos. Para el alcalde, la actitud negativa del Consell Executiu contrasta con la del Gobierno central que "está demostrando, a pesar de su lentitud, una capacidad de respuesta que la Generalitat no tiene".Esta valoración estuvo acompañada de un largo memorial de agravios en el que la acusación más fuerte fue la siguiente: "Las compañías interesadas en la construcción del metro de Montjulic han sido presionadas para que abandonen el. proyecto". Anoche, el conseller Molins replicó a esta acusación a través de Europa Press, afirmando textualmente: "Lo que dice Maragall es simplemente mentira". "La Generalitat ha cumplido todos los compromisos olímpicos y lo ha hecho con creces", añadió.

Maragall calificó de "frívolas" las críticas de Molins al plan de hoteles. "Un conseller", dijo, "no puede alentar suspicacias ni avanzar posiciones alegando una pretendida coherencia de partido". "No comparto las críticas de los comunistas", explicó, .pero los concejales de IC se leyeron el expediente y dijeron cosas sensatas, en cambio CiU no se miró ni el forro".

Las acusaciones de Convergéncia, según el alcalde, forman parte de una operación de descrédito que pretende mostrar a los ayuntamientos gobernados por la izquierda como favorecedores de la especulación. "Ahora prentenden decirnos", continuó Maragall, "que si los Juegos tienen éxito será gracias a la fiebre del oro. Yo digo que saldrán bien porque se está trabajando bien".

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