Carlos Solchaga insiste en que el Gobierno descarta una devaluación de la peseta
El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, manifestó ayer que la lucha contra el rebrote de la inflación era, indirectamente, la mejor vía para corregir los crecientes desequilibrios de la economía española, y volvió a descartar cualquier medida devaluatoria sobre la peseta. El ministro cifró en unos 7.000 millones de dólares (más de 800.000 millones de pesetas) el probable déficit al final de este año en la balanza por cuenta corriente. Cuando España se integró en la CE, en 1986, existía un superávit por cuenta corriente cercano a los 530.000 millones de pesetas.
Carlos Solchaga ofreció un panorama de la macroeconomía española en un seminario que, bajo el título España y Europa a partir de 1993, se celebró en Madrid con el patrocinio del diario internacional Herald Tribune, Actualidad Económica y Leo Burnett Advertising.El ministro señaló que las "tensiones de crecimiento" eran las causantes del brote de inflación y de los desequilibrios externos. Como datos a tener en cuenta subrayó que la inversión había crecido un 14% durante 1988 y que en el último quinquenio un 60% de la inversión global se había dirigido a la compra de bienes de equipo.
Esta renovación industrial, dijo Solchaga, "mejorará a medio plazo la competitividad española y permitirá incrementar las exportaciones", reduciendo la diferencia, actualmente negativa, frente a las importaciones. A corto plazo, sin embargo, la demanda interna sigue creciendo y provocando tensiones en los precios. A ello añadió Solchaga su temor a que "la falta de concertación social dé lugar este año a unos convenios con incrementos salariales elevados", y con ello una mayor inflación, lo que haría peligrar el crecimiento económico.
Las tensiones que esta demanda interna está provocando no serían demasiado alarmantes ya que, en opinión de Solchaga, hay reservas (40.000 millones de dólares) y tiempo suficiente para corregir el déficit de la balanza comercial sin actuar sobre la peseta, a pesar de su continua apreciación en los últimos tiempos, debida según el ministro a los flujos de de capitales.
Política monetariaEl mecanismo principal en la lucha contra la inflación debe ser, según el ministro, la política monetaria, por la vía del endurecimiento de los tipos de interés, "aunque procurando que los tipos a largo plazo se mantengan moderados". La política fiscal fue rechazada por el ministro como instrumento antiinflacionario, a pesar de las recomendaciones de distintos organismos internacionales, dada "la necesidad de desarrollar las infraestructuras españolas, lo que requiere un gasto público generoso". Solchaga adelantó que en 1989 el déficit fiscal rondará el 2,7% del producto interior bruto (PIB).
En el mismo seminario intervino seguidamente el secretario de Estado de Comercio, Apolonio Ruiz Ligero, que hizo una descripción del futuro mercado único, y se reunió después en un panel a los empresarios Manuel Guasch (Renault España), Cándido Velázquez Gaztelu (Telefónica) y Juan Antonio García-Díez (Uralita), junto con el presidente de la Comisión del Mercado de Valores, Luis Carlos Croissier, y el dirigente de UGT Apolinar Rodríguez.
Guasch expresó sus dudas sobre si la Europa de 1992 sería un mercado único o la suma de 12 mercados muy abiertos"; Velázquez-Gaztelu reclamó para Telefónica "un sistema tarifario que le proporcione ingresos suficientes para acometer las inversiones que necesitará en el futuro", y García-Díez pidió "una política fiscal menos expansiva para controlar la demanda interna". Croissier recordó que aún está por definir el modelo de mercado único en sus rasgos principales (fiscal, monetario, etcétera), y el ugetista Apolinar Rodríguez se opuso a que España "practique el dumping social", manteniendo a los trabajadores en una situación desfavorable respecto a la media comunitaria.
A continuación intervinieron Alfonso Escámez, presidente del Banco Central, y Julio Calleja, presidente de BNP España, que hablaron del mercado financiero europeo; y José Barrionuevo, ministro de Transportes, que habló sobre las infraestructuras turísticas.
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