Terminar con una 'muerte civil'
El motivo de esta carta es solicitarles su colaboración para terminar con la muerte civil de mi padre, Salvador Valverde.Periodista, comediógrafo y fundamentalmente escritor de canciones tan famosas como La cruz de mayo, María de la 0, Ojos verdes, Castillito de arena o Si vas a Calatayud, entre más de 1.000 ' su nombre fue prácticamente borrado en España desde el final de la guerra civil, como si jamás hubiera existido.
Su condición de republicano y el hecho de que tomara el camino del exilio en 1939, radicándose en Argentina, podría considerarse razón para que durante el franquismo los locutores de radio, cada vez que transmitían una de sus canciones, omitieran su nombre. Pero lo que resulta incomprensible es que con la consolidación de la democracia esa muerte civil se perpetúe.
En un artículo publicado en EL PAÍS el 15 de diciembre de 1988 con motivo del fallecimiento de Manuel Quiroga, su autor señala que "Quiroga, con Antonio Quintero y Rafael de León como letristas, formó una trinidad fundamental en la música popular española de los últimos 50 años". Luego menciona entre sus canciones más populares Ojos verdes y María de la O, ambas escritas, no por Quintero, sino por Valverde, León y Quiroga. No pongo en duda la buena fe del autor de la nota, pero pienso que él también ha sido víctima de la falta de información por ese medio siglo durante el cual mi padre permaneció borrado.
Deseo recordar que Valverde, en su querida Sevilla, y ya en 1924, escribió La cruz de mayo y Sol de España con el maestro Font de Anta. Al trasladarse a Madrid, al comienzo de la década de los treinta, comenzó su colaboración con León y Quiroga, escribiendo con ellos centenares de canciones tan populares como Ojos verdes, María de la 0, María Magdalena, Maricruz, Triniá, Llora la guitarra, Soleá, etcétera. También escribió con León las comedias María Magdalena (1937) y María de la O y una versión para el cine de esta última (1939) con Carmen Amaya y Pastora Imperio. A partir de 1940, Antonio Quintero ocupa el lugar que' Valverde dejó junto a León y Qu¡.-oga. Al mismo tiempo, en Argentina, mi padre compuso más de 200 canciones, algunas tan populares como Castillito de arena y Si vas a Calatayud, con Ramón Zarzoso.
Mi padre falleció en Buenos Aires el 5 de agosto de 1975. Un homenaje que bien podría rendírsele por el amor con que cantó a España es, simplemente, dejar de negarle la paternidad de sus obras.-
