_
_
_
_

Sajarov aún no ha sido nombrado candidato en las elecciones soviéticas

Pilar Bonet

Las asociaciones soviéticas, a las que corresponden 750 escaños en el futuro Parlamento, vivían ayer su apogeo electoral con las votaciones que se realizaban paralelamente en tres de las entidades con más solera de la vida intelectual soviética: la Academia de Ciencias, la Unión de Escritores y la Unión de los Cineastas de la URSS. Andrei Sajarov, el científico y premio Nobel de la Paz, es el protagonista de un conflicto que ha levantado pasiones.

La Academia de Ciencias dará a conocer oficialmente hoy los resultados de la votación efectuada el pasado lunes por la mañana en una conferencia de 1.500 delegados. Los puestos reservados a la Academia en el futuro Congreso de los Diputados populares de la URSS son 20, y el total de candidatos elegidos en enero por el Presidium de la Academia, era de 23. Entre ellos no estaba Sajarov, a pesar de tener el apoyo de más de una cincuentena de institutos científicos.Las posibilidades de Sajarov, un símbolo de la democratización en la URSS, no estaban cerradas todavía, pues, si un número de candidatos de la lista presentada no obtenía la mitad más uno de los votos, las vacantes se iban a someter a una nueva ronda electoral. En este caso, y en el supuesto de que hubieran quedado por cubrir cuatro puestos o menos, el nombre de Sajarov y el de otros candidatos podría ser incluido en la lista, según parecía ser la posición final de un bizantino debate sobre las competencias de la conferencia.

Representación ecologista

En un pleno de la Unión de Escritores salieron elegidos 10 diputados tras la votación sobre 11 candidatos. Destaca una nutrida representación del sector ecologista ruso en las personas de Serguei Zaliguin, el director de la revista Novi Mir, y los siberianos Valentín Rasputín (Irkutsk) y Víctor Astafiev (Krasnoyarsk). Hace pocos días se ha fundado en Moscú el Grupo Abril, que agrupa ya a 350 autores, entre cuyas reivindicaciones está la publicación y rehabilitación del escritor deportado Aleksandr Solyenitsin.El Grupo Abril, nutridamente representado en el pleno, considera que la Unión de Escritores no es apta para realizar la perestroika en el campo de la literatura.

Para hoy, se esperaba que el jurista Arkadi Vaksberg diera a conocer al pleno de los escritores los resultados de la investigación sobre las acusaciones de plagio formuladas en un informe sobre el primer secretario de la Unión, VIadimir Karpov.

En las conclusiones de la comisión, hechas llegar a la Prensa extranjera, se afirma que un ensayo sobre el poeta Nikolai Gumiliov, publicado en 1986 por Karpov, había omitido mencionar un prólogo sobre el mismo tema publicado en Washington en 1962 "porque en aquella época (1986, se entiende) no era costumbre hacer referencias a publicaciones emigrantes".

El prólogo en cuestión, del que es autor el crítico literario de origen ruso Gleb Struve, coincide en valoraciones, citas y estructura con el artículo de Karpov, quien en una entrevista con esta corresponsal dijo no haber tenido acceso al artículo de Struve.

Uno de los escritores asistentes al pleno, David Kugoltinov, pidió anteayer que, en la plataforma política de los diputados de la asociación figure el restablecimiento de la república alemana del Volga y la república tártara de Crimea, ambas anuladas por Stalin.

En la Unión de Cineastas, considerada la asociación intelectual más progresista de la URSS, su primer secretario, el director de cine Elem Klimov, retiró su candidatura por considerar que su trabajo no le deja ni tiempo ni fuerzas para la tarea de diputado.

El 'caso Eltsin'

Entre los candidatos a los 10 puestos de la Unión de Cineastas estaba el escritor bielorruso Ales Adamovich y el director del semanario Novedades de Moscú, Egor YakovIev.Por otra parte, el periodista Mijail Poltaranin, antiguo director del periódico Moskovskaia Pravda, fue elegido como diputado en el elenco de 10 nombres que representarán a la Asociación de los Periodistas en el Parlamento.

Poltaranin, un buen amigo de Boris Eltsin, el destacado disidente en el seno del PCUS, ha desencadenado una tormenta en la televisión soviética, desde cuya pantalla dijo el viernes pasado que las preguntas formuladas a Eltsin durante un debate televisivo habían sido amañadas. Eltsin, que sigue monopolizando el interés de los soviéticos, debía presidir ayer uno de los puntos culminantes de su enérgica campaña: un mitin en la fábrica Zil de Moscú que dirige su contrincante político Evgueni Brakov.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_