Controles en Santiago.

Más de 1.000 policías buscan en Santiago de Compostela a los cinco integrantes del comando de los GRAPO que el pasado viernes asesinaron a dos guardias civiles que prestaban servicio, en la sucursal del Banco de España, ya que, se baraja la hipótesis de que los terroristas puedan estar ocultos en varios pisos francos. Ramón Berra, gobernador civil de La Coruña, no quiso confirinar ayer si se estaban realizando registros en los domicilios. Berra acusó a la empresa encargada de la seguridad del banco de desidia por mantener unas cintas de vídeo durante siete años, lo que originó que no fueran grabadas las imágenes. En la fotografía, uno de los controles policiales efectuados ayer en Santiago. Página 15