Primera condena contra mafiosos por un crimen de terrorismo

La sentencia dictada el sábado en Florencia contra los organizadores del terrible atentado al tren Napoles-Milán del 23 de diciembre de 1984 -que produjo 16 muertos y 267 heridos y que ha supuesto cinco cadenas perpetuas- es de excepcional importancia, al tratarse de la primera vez que es condenado un grupo de mafiosos por un crimen de terrorismo.Según los jueces del tribunal, que también condenó en el mismo caso a varios neofascistas, la intención de los criminales fue provocar una matanza capaz de desviar la atencion del Estado sobre la Mafia en un momento en que ésta se veía acorralada.

De hecho, según la sentencia, sólo por un milagro no murieron todos los pasajeros del tren, como era la intención de los terroristas, que pretendían que una bomba de gran potencia explotase dentro de un túnel, se incendiara el convoy, que iba abarrotado, y muriesen todos en una hoguera dantesca.

El abogado de la parte civil, Guido Calvi, asegura: "Esta sentencia reviste una importancia capital, ya que es la primera vez que se demuestra que la criminalidad mafiosa ha usado los instrumentos típicos de la subversión terrorista neofascista, es decir, la matanza indiscriminada de ciudadanos inocentes". Ha sido ésta, además, la primera vez que aparecen juntos, en un acto de terrorismo contra el Estado, no sólo la Mafia y el fascismo negro, sino también la Mafia y la Camorra, ya que entre los condenados figuran también tres personajes le la mafia napolitana.

El fiscal había pedido cadena perpetua para los nueve acusados, pero dos han sido dejados -en libertad por insuficiencia de pruebas y, de los otros dos, uno ha sido condenado a 28 años y el otro a 25.