En el nombre de Dios
El escritor Salman Rushdie ha sido condenado a muerte por pensar, por escribir.Todos los implicados en la publicación de su último libro han sido también marcados para su ejecución.
Por permitir que otros piensen, por publicar sus escritos.
Probablemente las siguientes víctimas seamos sus lectores.
¿Es suficiente un simple editorial de papel que sólo argumenta sobre el fanatismo inquisitorial y apenas se para a considerar el más que probable asesinato de alguna de las personas amenazadas?
En nombre de la libertad y de la vida, pido a todo el mundo que hagamos lo posible -y lo imposible, si fuera necesario- por desmontar esta peligrosísima amenaza. Para salvar sus vidas y puede que las nuestras.
Que se publique una edición internacional conjunta que implique a todas las personas que con esta causa se solidaricen.
Firmada por todos los escritores, editada por todas las editoriales. Que se publiquen fragmentos significativos de la obra en diarios y revistas.
Espero que con ello se logre hacer recapacitar a Jomeini que no todos compartimos su fanática visión de la religión y de la vida. Que las religiones y sus profetas son lo que son y están donde están independientemente de pequeños ataques y esmañados gestos de defensa. Que retire su incalificable proclama del asesina en nombre de tu dios (y de tres millones de dólares, claro). Que se dé cuenta del daño que está haciendo a la religión que tan seguro está de defender (más que una legión de Rushdies juntos).
En pro de ello pienso poner mi granito de arena. Compraré un libro. Y lo leeré. Que lo sepan Jomeini y los suyos.
¡Viva la idea y viva la libertad!-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.