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Cerrado por carnaval

Tenerife refuerza, a ritmo de "salsa", la imagen internacional de sus fiestas

Santa Cruz de Tenerife ha colocado el cartel de cerrado por carnaval. La ciudad se dilata estos días para dar cabida cada noche a unas 200.000 personas que se dan empujones en un cuadrilátero urbano de 100.000 metros cuadrados para ganar un palmo de terreno donde bailar jaleadas por la marcha incontenible de las orquestas venezolanas y canarias. El Ayuntamiento de Tenerife pretende que a partir del año próximo la fiesta deje de ser amateur y funcione como una empresa sin pérdidas.

Venezuela se ha quedado sin orquestas: Billos, Vibraciones, Los Melóclicos y el rey de la salsa, Óscar D'León, son las estrellas del mayor espectáculo al aire libre, con el que el pueblo amanece antes de ir a trabajar sin que le haya costado un duro la función de merengue.La imagen de un grupo de bailarinas brasileñas en tanga contratado por un empresario que desde hace algunos años pone a la fiesta este punto de atrevimiento rivaliza en las calles con otras danzarinas esculturales del país, ligeras de ropa, que lucen una conocida marca de cerveza local.

El carnaval de Tenerife fue coronado estos días en Europa. La reina del año pasado, Laura Alberto Barroso, y la comparsa Los Brasileiros ganaron el carnaval de carnavales en Niza (Francia). "Ésta será la última edición amateur", señaló el al calde de la ciudad, Manuel Hermoso Rojas, una mascarita más en la calle. Pretende que la fiesta funcione como una empresa sin pérdidas. Se creará una sociedad anónima, con el Ayuntamiento como principal accionista, para reducir el déficit de un presupuesto que alcanzó esta vez el techo de los 269 millones de pesetas. Grupos y carrozas ya disponen de patrocinadores publicitarios.

Toneladas de basura

Hoy es el día grande, martes de carnaval. Anoche nadie durmió en casa, y los operarios del servicio de limpieza, que hoy, día festivo, tendrán que lavar la cara a las calles más sucias del año, serán de los pocos desafortunados obligados a currar, porque les aguarda una dura faena: retirar 300 toneladas de basura.La tendencia a no dar golpe se contagia sin querer, y, aunque no haya sido medido, es evidente que el abstencionismo y el escaso rendimiento laboral se ha generalizado a estas alturas y que la ciudad no recobrará su pulso hasta pasado el entierro de la sardina, el día 8. El propio rostro urbano (un templo faraónico junto al mar, una avenida de gradas y quioscos, calles cortadas con barras de bar en las aceras y un gentío que tapa el asfalto) no recuerda al Santa Cruz de hace unos días. Esta ciudad peatonal, sin transporte público ni privado, es el sueño de una población que el resto del año sufre el síndrome del tráfico hasta el cuello.

Desde el mismo día de la cabalgata (una serpiente de carrozas, coches engalanados y más de 2.000 personas distribuidas en comparsas, murgas, grupos coreográficos y musicales), el viernes, con más de 150.000 personas en la calle, se produjo la metamorfosis. Santa Cruz es un pandemónium en el que conviven el King Kong de la plaza de la Paz con las esfinges egipcias de la plaza de España; el Charlot de Pedro Gómez Cuenca ("llevo con éste 32 años y no he faltado ni uno") con el mejor showman de la fiesta, Sergio Méndez ("mi abuelo no regresaba a casa hasta que terminaba el carnaval; lo llevo en la sangre").

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