Economía regulara la entrega de las listas de seguros de prima única

La entrega a Hacienda de las listas de suscriptores de primas únicas por parte de las compañías aseguradoras a partir de una determinada cantidad quedará regulada próximamente, una vez que terminen los procesos judiciales en marcha. Por otra parte, en un informe de la Dirección General de Seguros se afirma que el "espectacular" crecimiento en los seguros de vida tiene su explicación en este tipo de operaciones, realizadas en su mayoría por entidades vinculadas a los principales grupos financieros, y que los balances de las compañías pueden verse distorsionados por una actividad que poco tiene que ver con el seguro tradicional.

La nueva regulación en estudio, que obligará a las compañías de seguros a entregar las listas de suscriptores de pólizas de prima única, llenará el resquicio legal que ha permitido a estas compañías acudir a los tribunales antes de entregar su relación de clientes a Hacienda. En principio, se trata de extender las normas actuales, que obligan a empresarios y profesionales a declarar sus operaciones comerciales con terceras personas por encima de 500.000 pesetas anuales.En los primeros requerimientos a las compañías de seguros para la entrega de listas, Hacienda echó mano del decreto sobre declaración anual de empresarios y profesionales sobre sus operaciones con terceras personas (1986), que desarrolló otro anterior sobre el deber de expedición y entrega de facturas (1985). El objetivo de ambas normas es obtener información de estas transacciones para cruzar los datos con las declaraciones del IVA y renta.

El argumento de Hacienda es que las pólizas con prima única entran también en lo regulado por ambos decretos. Las compañías de seguros, por su parte, se agarran a que estas operaciones no están expresamente mencionadas en los dos decretos, lo que les ha dado pie a iniciar los recursos legales para negarse a la entrega de las listas. Hacienda ha argumentado su defensa en base al artículo 111 de la ley General Tributaría, que regula también las obligaciones de información. Por el momento, la administración tributaria ha ganado la batalla en los recursos de La Unión y El Fénix y La Estrella.

La modificación legal no se llevará a cabo hasta que no se pase la marea de los recursos legales en marcha, ya que, si se hace antes, sería tanto como reconocer que este vacío legal existe. Por el momento, se espera para fechas próximas la sentencia del Tribunal Económico Administrativo Central (TEAC) sobre el recurso planteado por La Caixa, aunque no en esta semana, como se había anunciado, ya que la entidad podría solicitar una ampliación del período de alegaciones ahora en marcha.

Seguros de vida

Por otra parte, la Dirección General de Seguros señala, en su informe correspondiente al primer semestre de 1988 -a punto de ser publicado-, que el espectacular crecimiento de los seguros de vida tiene su origen en la canalización de fondos a través de las operaciones de seguros a prima única, realizadas en su mayoría por las aseguradoras vinculadas a los grupos financieros. En total, la recaudación de primas por seguro directo ha alcanzado en el primer semestre del pasado año los 1,085 billones de pesetas, a los que hay que añadir 614.636 millones de pesetas procedentes de la actividad aseguradora de las entidades de depósito, de las que la mayor parte corresponde a las primas únicas. Ello ha lanzado a los primeros lugares del ranking del sector a las compañías vinculadas a grupos financieros, en detrimento de las aseguradoras independientes. Comparado el período de junio de 1987 a junio de 1988, la recaudación total por seguro directo alcanza los 3,13 billones de pesetas, con un crecimiento del 26,1%. Si se toma como referencia el año 1985, la actividad del conjunto del sector se ha multiplicado por 4,6 veces en dos años y medio. Este crecimiento "espectacular" se explica en su mayor parte por la aparición de este nuevo producto, cuyo vencimiento medio suele situarse a seis meses y cuyo mayor atractivo es la opacidad fiscal.

De la memoria semestral de Seguros se desprende que la aparición de este producto ha distorsionado los balances de las entidades aseguradoras. Concretamente, en el ramo de vida -1,34 billones de pesetas, el 61,3% sobre el total del seguro directo y casi el doble de todo Io recaudado en 1987-, los beneficios suponen el 0,66% de las primas adquiridas en el primer semestre del pasado año, mientras que en el año 1987 suponían el 2,6%.