Chaves explicará al Congreso el conflicto con las centrales

La información sobre el conflicto entre el Gobierno y los sindicatos llegará al Congreso el próximo día 1 de febrero, al haber solicitado el ministro de Trabajo, Manuel Chaves, comparecer ante la comisión de política social y empleo para dar cuenta expresamente de las conversaciones habidas con las centrales y su resultado, una vez finalizado el plazo fijado para el 31 de enero.El Grupo Popular, a través de la diputada Celia Villalobos, ha solicitado de la presidencia del Gobierno "las cintas de las conversaciones mantenidas por el presidente del Gobierno con los sindicatos".

Celia Villalobos considera tales grabaciones como documentos de la Administración a cuyo acceso tienen derecho los parlamentarios según el reglamento de la Cámara. Con ello quiere apreciar si realmente ha habido o no "espíritu y voluntad de negociar".

La comisión de política social y empleo remitió ayer a Chaves, a través de Relaciones con las Cortes, un escrito por el que se le convoca a las 16.30 horas del próximo 1 de febrero, en cumplimiento de su petición. El Gobierno tendrá en esa ocasión la primera oportunidad de explicar si piensa adoptar medidas sociales o mantener las ofertas que, hasta ahora, ha ofrecido a los sindicatos si es que no llegara a un acuerdo con éstos. Las fuentes gubernamentales informantes aseguraron que el discurso de Chaves "no está todavía cerrado".

El "estado de la nación'

A pesar de la comparecencia del ministro de Trabajo, la oposición espera la intervención del presidente del Gobierno, Felipe González, en el debate del estado de la nación para conocer su opinión personal sobre las reivindicaciones sindicales, así como los objetivos del Gobierno en la presidencia comunitaria.

El Gobierno, al menos hasta ayer, veía serias dificultades para cambiar la fecha de celebración del debate sobre el estado de la nación, como ha pedido el portavoz del CDS, Agustín Rodríguez Sahagún. Los días 14 y 15 de febrero eran los previstos, pero el CDS quiere que se corran las fechas un día al estar Adolfo Suárez ocupado con una reunión en Madrid de la Internacional Liberal, a la que pertenecen desde hace varios meses.