Dalí se mantiene en estado de extrema gravedad
Salvador Dalí seguía ayer en estado de extrema gravedad. El director del hospital de Figueres, el médico Carlos Ponsatí, aseguró que, ante la posibilidad de alargar artificialmente la vida del paciente, se ha tomado la determinación de procurar que el pintor tenga Ia muerte más digna posible". Según el parte médico que se dio a conocer a las 20 horas de ayer, la situación del paciente era estacionaria y no había experimentado cambios significativos en el curso de las últimas horas. Mantenía las constantes vitales y seguía recibiendo tratamiento para la insuficiencia cardiaca y respiratoria y para la neumonía.
El equipo médico que atiende al pintor, formado por el director del hospital comarcal y los médicos Marc Cuixart, Francesc Pujol, Carme Sala, Miquel Sala y Ramón Sans, calificó el estado del paciente de muy grave y consideraron, en posterior rueda de prensa, que las próximas 72 horas son decisivas para la evolución del paciente.
Los facultativos señalaron también que Dalí sigue respondiendo de forma "mínima y poco apreciable" al tratamiento y precisaron que el pintor ampurdanés, que no está intubado ni sometido a respiración asistida, se mantiene lúcido con fases de obnubilación.
El médico de cabecera de Salvador Dalí, García Sanmiguel, que hasta ahora se ha mantenido en contacto permanente con el equipo médico del centro, se desplazará hoy al hospital de Figueras para seguir de cerca la evolución del enfermo, informa Europa Press. Según Ponsatí, García Sanmiguel está de acuerdo con el tratamiento que se está aplicando al paciente. El equipo médico reiteró ayer la inconveniencia de un posible traslado a otro centro sanitario porque, según manifestó Ponsatí, el hospital figuerense está debidamente equipado y porque cualquier traslado del paciente a Barcelona podría ocasionar problemas con "complicaciones fatales".
Grave crisis
Los médicos dijeron también que la muerte de Salvador Dalí podría producirse en cualquier momento de este fin de semana, aunque también exista la posibilidad de que supere la crisis, la más grave que ha sufrido el pintor en los últimos meses.Durante el día de ayer, y aunque se le restringieron las visitas, Dalí tuvo a su lado a sus amigos y colaboradores habituales, Mariá Lorca, alcalde de Figueres, Antoni Pitxot, y Artur Caminada, entre otros. El delegado de Gobernación de la Generalitat en Girona, Xavier Soy, visitó también al pintor.
Los miembros de la fundación Gala-Dalí y el abogado del pintor, Miquel Domenech, mantuvieron ayer por la mañana diversas reuniones para asegurar que las cosas estén a punto en el momento de la muerte del artista. El responsable de protocolo del departamento de Cultura de la Generalitat, Antoni López, se entrevistó con el alcalde de Figueres y con Miquel Domenech para tratar de los diversos aspectos relativos al ceremonial a celebrar si Dalí muere en el curso de las próximas horas.
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