Una pulmonía hace temer por la vida, de Dalí

EL PAÍS El estado de salud del pintor Salvador Dalí, ingresado en la madrugada del pasado miércoles en el hospital comarcal de Figueres (Gerona) por una insuficiencia cardiaca aguda, se agravó ayer por la tarde al declarársele una pulmonía. El parte médico emitido en la medianoche de ayer indicaba que Dalí mantenía sus constantes vitales y se encontraba en estado estacionario, aunque su pronóstico seguía siendo grave. Los médicos que atienden al pintor en el hospital de Figueres consideratan en dicho parte que el estado de salud del enfermo era "preocupante", por lo que "se teme por su vida".

Carlos Ponsatí, médico de cabecera del artista y responsable del equipo médico que atiende a Dalí en el hospital, precisó que no descartaba que el pintor pudiera sufrir una insuficiencia respiratoria que le provocara la muerte, aunque cabía la posibilidad de que "pueda pasar la noche".Los facultativos que atienden a Salvador Dalí descartaron ayer un posible traslado del pintor a Barcelona debido a los riesgos que podría entrañar su desplazamiento por carretera. Los médicos empezaron ayer por la tarde a aplicarle un tratamiento contra la pulmonía y otro contra la insuficiencia cardiaca aguda, motivo por el que fue ingresado en el hospital de Figueres en la madrugada de' miércoles.

"Es una tragedia. Dalí está muy lúcido y pendiente de su estado, por eso es una tragedia" declaró ayer por la noche a Radio Nacional el secretario personal y amigo del pintor, Robert Descharnes, quien informó que Dalí había pedido que le dejaran oír música, y que escuchaba la música del pianista del restaurante Maxim's, de París, que hacía unos meses había pedido que le grabaran.

Interés de los Reyes

Los Reyes de España, que se encontraban en visita oficial en Almería, se interesaron ayer por la salud del pintor. Mariano Lorca, alcalde de Figueres confirmó a los monarcas la preocupación de los médicos ante la posibilidad de un desenlance fatal en corto plazo.

Ayer por la mañana, Salvador Dalí evolucionaba favorablemente, según informó su médico de cabecera. Se llegó a decir incluso que el pintor podría volver a su domicilio de Torre Galatea, en Figueres, este mismo fin de semana o a principios de la semana próxima. "Ha pasado muy buena noche y en general ha experimentado una mejoría", decía Ponsatí, mientras en el hospital se seguía practicando a Dalí pruebas para descubrir y prevenir una posible recaída, especialmente de tipo cardiaco o respiratorio.

El médico personal del artista informó que estos dos aspectos eran los que más se cuidan porque, aunque Dalí sufre también un problema generalizado de falta de defensas, "esto no es nada extraño a los 84 años".

Desde que fue ingresado en la madrugada del miércoles, el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol; el delegado del Gobierno en Cataluña, Francesc Martí i Jusmet, y el conseller de cultura de la Generalitat, Joan Guitart, se han interesado por el estado de salud de Dalí. El alcalde de Figueres, Mariá Lorca, que ha seguido de cerca los diversos agravamientos de salud del pintor figuerense, suspendió sus vacaciones en el extrajero y ayer por la tarde se trasladó al hospital de Figueres, donde visitó al artista. A su salida, Lorca manifiéstó que se sentía pesimista sobre la evolución de Salvador Dalí. "A pesar de que soy una persona optimista", dijo, "ésta es la ocasión en que he visto peor al pintor".