_
_
_
_

El miedo al uso terrorista

EL PAÍS, La producción de armas químicas por parte de países del Tercer Mundo coincide con la potenciación de diversas iniciativas de las principales potencias para reducir y hasta eliminar ese tipo de armas que se usó por primera vez en enero de 1915, durante la I Guerra Mundial, y recientemente en la guerra Irán-Irak. La posibilidad de que países pobres accedan, por la escasa inversión que se necesita, a la posesión de esas armas preocupa en los países avanzados no ya sólo por su utilización en posibles conflictos regionales, sino también por la posibilidad de que caigan en manos de grupos terroristas.

Sólo en la I Guerra Mundial más de 300.000 personas murieron por efectos de las armas químicas. Su alto efecto aniquilador hizo que EE UU decidieran interrumpir su producción en 1969, aunque la decisión llegó después de que hubieran arrojado sobre Vietnam unas 90.000 toneladas de productos químicos mortales para las plantas o los seres vivos.

Más información
España solicita a EE UU datos sobre las armas químicas que produce Libia

La URSS, EE UU y Francia son las potencias con mayores arsenales de armas químicas. En total, más de un millón de toneladas.

En 1925, 108 países (entre ellos Irak) firmaron un acuerdo por el que se comprometían a no usar armas químicas. Hoy hay cinco iniciativas internacionales para su reducción o destrucción, pero la OTAN y el Pacto de Varsovia incluyen en sus ejercicios el posible uso de esas armas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_