Dos cosmonautas soviéticos anuncian hoy su regreso a la Tierra tras pasar un año en la estación 'Mir'
Los cosmonautas soviéticos VIadimir Titov y Musa Manarov cumplieron ayer 365 días de estancia continuada en el espacio a bordo de la estación Mir. Titov y Manarov, que batieron el pasado 12 de noviembre el récord de permanencia en condiciones de ingravidez -que ostentaba otro cosmonauta soviético, Yuri Romanenko-, vuelven hoy mismo a la Tierra, junto con el francés Jean Loup Chrétier , que permanece con ellos desde hace 26 días. Otros tres cosmonautas soviéticos permanecerán en la Mir, que ha estado continuamente habitada desde que llegó, en 1986, la primera tripulación.
Titov y Manarov han hecho coincidir su vuelta a la Tierra con la fecha (21 de diciembre) de su lanzamiento hace ahora un año, con lo que han permanecido en el espacio 366 días, ya que este año ha sido bisiesto. A la vuelta de Titov, Manarov y Chrétien, permanecerán en la Mir los dos cosmonautas que viajaron con Chrétien hacia la estación -Alexander Volkov y Serguei Kirikalev- el pasado 26 de noviembre, y el médico Valeri Poliakov, que se incorporó a la tripulación de la estación el pasado mes de agosto.Los cosmonautas realizaron el pasado domingo una conferencia de prensa desde la Mir para la Prensa soviética y francesa.
"Mi adaptación a la falta de gravedad se ha realizado muy rápidamente, en tres o cuatro días. Esto se debe al control del peso y al entrenamiento físico que he realizado", señaló Chrétien, quien añadió: "La vida en el espacio no es nada fatigosa, a excepción de que no se puede tener nada arreglado. Esto es un desorden organizado. Los científicos nos han dado demasiado trabajo. Trabajamos de nueve de la mañana a 10 de la noche y nos falta tiempo para admirar el planeta".
Por su parte, Manarov, ante una pregunta sobre la posibilidad de permanecer más tiempo en el espacio, se declaró optimista: "Es necesario tener un objetivo. Esto es muy importante. Pienso que los hombres que viajen a Marte tendrán ese objetivo y podrán aguantar los tres años de viaje, pero creo que hay que tener prudencia".
