Los 17 de Bruselas
El presidente de la Comisión Europea, Jacques Delors, quiere que haya una rotación de carteras
Con la designación, a finales de la semana pasada, de los dos miembros italianos de la Comisión Europea, los 17 integrantes del próximo órgano ejecutivo comunitario han sido todos nombrados, y ahora deberán consagrarse a su primera y acaso más ardua tarea: repartirse, en una reunión nocturna conocida con el nombre de la noche de los cuchillos largos, unas carteras demasiado numerosas y, por tanto, a veces carentes de contenido como para poder dar satisfacción a todos. El presidente de la Comisión, el francés Jacques Delors, que dispone de un cierto margen de maniobra en el reparto de papeles, ha reiterado hasta la saciedad que desea que "todos aquellos comisarios que permanecen cambien de cartera, y que todas las carteras cambien de bandera"; es decir, que se produzca también una rotación en la nacionalidad del titular de cada comisaría.De los 17 miembros de la actual Ejecutivo europeo, ocho seguirán en Bruselas, y España es el único Estado grande con derecho a dos comisarios que no sustituye por lo menos a uno. Entre los nueve comisarios que abandonan el cargo, alguno, como el conservador británico lord Cockfield, ha sido reemplazado por haber sido demasiado europeísta a juicio de Londres, mientras otros elementos prestigiosos como el belga Willy de Clercq y el irlandés, Peter Sutherland, cesan porque la mayoría gubernamental se ha modificado en su país y el partido al que pertenecen ya no está en el poder.
Delors quedará así privado de algunos de sus más íntimos colaboradores, y para que sus sustitutos formen un equipo coherente que le inspire confianza había pedido en la cumbre europea de Hannover ser asociado a la elección de los comisarios. En vano. "A veces me he enterado de la designación por la radio o, en el mejor de los casos, por una llamada telefónica", comentaba el presidente el lunes en una conferencia de prensa. El portavoz adjunto del Elíseo fue, por ejemplo, el que le informó del nombramiento de su compatriota Christiane Scrivener.
El presidente español, Felipe González, tuvo el detalle de comunicarle personalmente a Delors en la cumbre de Hannover de junio pasado el mantenimiento de los comisarios españoles, Manuel Marín y Abel Matutes, y se lo confirmó ulteriormente en una misiva enviada el 11 de noviembre.
Embrión de Gobierno
Pese al fracaso de su gestión, el segundo presidente en la historia de la CE que ha visto prorrogado su mandato asegura que "no se podrán tornar las decisiones necesarias de aquí a 1995 si de una forma u otra no se crea un embrión de Gobierno europeo". La Comisión dista mucho de serlo porque sólo posee limitados poderes de gestión y de proposición al Consejo de Ministros.
Antes de tomar posesión, los comisarios que repiten y los recién llegados, entre los que figuran por primera vez dos mujeres, Scrivener y la griega Vasso Papandreu, tienen previsto reunirse el 16 de diciembre en una abadía cerca de Bruselas para conocerse mutuamente y distribuirse colegialmente las carteras, aunque Delors acudirá al templo con un borrador del reparto. Si no lo consiguiesen en este primer intento, volverán a encontrarse a principios de enero, antes de Reyes.
Lo único absolutamente seguro sobre el reparto de funciones en la nueva Comisión, cuyo mandato concluirá con la entrada en vigor del mercado único en enero de 1993, es que Delors no predicará con el ejemplo porque además de la presidencia seguirá ostentando la cartera de cooperación monetaria y continuará dirigiendo el comité que lleva su nombre y que ha sido encargado de estudiar las perspectivas de unión monetaria.
Por lo demás, todo son especulaciones. Los españoles Marín y Matutes pretenden ambos mejorar su situación asumiendo respectivamente la importante cartera de Presupuesto y la de Cooperación con el Área Mediterránea y America Latina, pero el primero asegura en privado tener escasas posibilidades de ser satisfecho porque "consideran que sería un pedazo excesivo de la tarta para España", y acaso también porque su relación personal con Delors sigue siendo tensa. "No nos quieren dejar todavía entrar en las tripas de la casa", ha comentado también Marín.
En cuanto a las otras carteras con peso, los rumores apuntan a que el actual comisario de Agricultura, el holandés Frans Andriessen, se haría cargo de las relaciones exteriores; el ministro alemán de Economía, Martin Bangemann, del mercado interior; el británico Leon Brittan, de Industria e Investigación, y el ex ministro italiano de Agricultura, Filippo Maria Pandolfi, seguiría en Bruselas ocupándose del campo.
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