'In crescendo...'
El concierto inaugural de Ibermúsica no puede inscribirse entre lo mejor que su ciclo reportará. La Orquesta Halle de Manchester no supera un nivel de discreción y responde a un ejemplo obvio de que no siempre lo de fuera es netamente superior a lo nacional. El primer movimiento estuvo marcado por continuos fallos. La mayor parte de ellos se produjeron en la sección de metal. Hubo también frecuentes entradas a destiempo, causadas por Skrowaczewski al no marcar con la suficiente claridad. Afortunadamente, el ajuste y la calidad fueron mejorando a medida que la Sinfonía Resurrección progresó para alcanzar sendos muy plausibles tiempos finales. En el Urlicht brilló el buen decir de la mezzo Janice Taylor. Resultó más que destacable la intervención de la soprano Ivonne Kenny y sobre todo del Coro Filarmónico Eslovaco.El polaco Skrowaczewski es un director de más solidez y eficacia que profundidad. Alcanzó bien los clímax, como esa proclamación de la Resurrección del scherzo , pero faltó intimismo en los momentos líricos, sin contraste en el juego de pianissimo-fortissimo del allegro inicial. Igualmente hubiera sido deseable un mayor dibujo en la idílica ambientación del andante, un tiempo de neto contraste con el anterior como para que Mahler recomendase en la partitura efectuar una pausa de hasta cinco minutos.
Orquesta Halle
Coro Filarmónico EslovacoDirector: S. Skrowaczewski. Auditorio Nacional, 24 de noviembre. Madrid.
La seriedad habitual en el público del Real, corre peligro de perderse tanto en el nuevo Auditorio como en el Monumental. Durante este concierto, en el que hubo butacas vacías a pesar de haberse agotado las localidades, abundaron los ruidos, se hicieron fotos e incluso se escuchó el mensaje del buscapersonas de un asistente.
Babelia
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