_
_
_
_

Mulroney, favorito en las elecciones de hoy en Canadá

Los canadienses eligen hoy el 34º Parlamento de su historia, tras una agresiva campaña en la que el gran tema de discusión ha sido el polémico acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, firmado por el Gobierno conservador del primer ministro Brian Mulroney y que es rechazado por la oposición de liberales y de neodemócratas. Aunque los últimos sondeos dan clara ventaja al partido conservador en el poder, el pequeño porcentaje de indecisos puede, sin embargo, determinar no sólo el color del próximo Gobierno canadiense, sino si el proyectado mercado común norteamericano sigue adelante a partir del próximo 1 de enero o queda en papel mojado.

Más información
500 personas para la televisión

El virtual empate que existía hace una semana entre el Partido Progresista-conservador y el Liberal, se inclinó, según los tres últimos sondeos, a favor de los conservadores. 48 horas antes de las elecciones, una encuesta Gallup daba el sábado a los conservadores un 40% de los votos, un 35% a los liberales y un 23% al partido Nuevo Democrático. Un sondeo de Angus Reid pronosticaba un 41% a los conservadores, un 33% a los liberales y un 23% a los neodemócratas, Finalmente, ayer otro sondeo, de la empresa Insight Canadá, situaba en cabeza a los conservadores con un 43%, seguido de los liberales con un 33% y los neodemócratas con un 20%.De confirmarse esa tendencia de voto, el partido conservador canadiense en el poder lograría los 248 escaños que necesita para conseguir la mayoría parlamentaria.De acuerdo con las cifras de intención de voto, un 60% de los electores canadienses se muestran contrarios al tratado de libre comercio con Estados Unidos. Pero las distintas estrategias de la oposición liberal y neodemócrata descartan de antemano tina convergencia hacia el voto útil, en aquellos distritos donde pudieran derrotar a los candidatos conservadores.

Caballo de Troya

Junto a liberales y neodemócratas, en el 60% de los que se oponen al tratado con EE UU se incluyen también sectores sindicales y las elites culturales e intelectuales anglófonas, temerosos de perder la identidad nacional canadiense, que consideran dicho tratado el caballo de Troya de la americanización de Canadá.El acuerdo de libre comercio con Estados Unidos prevé la total desaparición de las barreras arancelarias entre ambos países en un plazo de diez años a partir del 1 de enero próximo. El mercado común norteamericano crearía el mayor bloque del mundo industrializado, al unir las economías de Estados Unidos (270 millones de consumidores) y de Canadá (26 millones de consumidores).

Actualmente el 80% de los intercambios de los dos países (132.000 millones de dólares, equivalentes a más de 15 billones de pesetas) están exentos de derechos arancelarios.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Según los partidarios del acuerdo, la eliminación total de las barreras arancelarias, supondría un poderoso factor de dinamismo para la economía canadiense, haciéndola más competitiva y aumentando su productividad al irse armonizando con la de su poderoso vecino del Sur. Las exportaciones canadienses de bienes y servicios representan un 30% del PIB, que se dirigen en un 80% al mercado estadounidense.

Frente a los argumentos económicos a favor esgrimidos por los conservadores y el mundo empresarial, los sectores que se oponen al tratado expresan sus recelos por el peligro que entraña para la supervivencia de la identidad nacional canadiense, su soberanía cultural y diferenciada y el deterioro de los servicios sociales (sanidad, educación, pensiones, etcétera) al reducir o acabar con los actuales sistemas de subsidios y ayudas públicas.

La polémica entre los partidarios del sí y los opositores al tratado de libre comercio, han hecho de las elecciones parlamentarias de hoy un auténtico referéndum con una campaña de 50 días cargada de duras acusaciones, insultos y descalificaciones entre los tres candidatos, que los observadores consideran que no tiene precedentes en la moderna política canadiense.

En la última fase de la campaña, los partidarios del acuerdo se lanzaron a un masivo bombardeo publicitario a los medios de comunicación para advertir y recordar a los electores de las grandes ventajas del mercado común norteamericano y la garantía que supondría para la economía canadiense al poder acceder en mejores condiciones al mercado de 270 millones de consumidores de Estados Unidos.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_