"Menos de diez empresas van a controlar los precios del suelo en Madrid durante años", según Izquierda Unida

"La política urbanística del Ayuntamiento de Madrid está diseñada no para llenar la especulación del suelo, sino para favorecerla y beneficiar a ocho o nueve grandes empresas, que, a través de las subastas municipales, se van a hacer con enormes extensiones de suelo y van a controlar los precios inmobiliarios en los próximos años", declaró Francisco Herrera, portavoz de Izquierda Unida. El Ayuntamiento, por ejemplo, ha expropiado los terrenos del Campo de las Naciones a 426 pesetas el metro cuadrado, lo ha subastado a 66.000, y los adjudicatarios lo venderán a 300.000 pesetas.

"En el Campo de las Naciones es posible que exista incluso una quiebra de la legalidad", añadió Herrera, "puesto que, cuando se empezaron a expropiar los terrenos, en 1981, tenía la calificación de suelo agrícola y de uso público. Habría que estudiar jurídicamente si, al recalificarlos y darles un uso privado, el Ayuntamiento no está obligado a ofertar los terrenos a sus antiguos propietarios antes de subastarlos".IU ha conseguido la documentación relativa a los precios del suelo en las 19 bolsas de pobreza y las 10 grandes actuaciones urbanísticas promovidas por el Ayuntamiento de Madrid. En todos los casos la tónica es la misma: en el Rancho del Cordobés el suelo fue expropiado a 5.280 pesetas el metro cuadrado. Una vez urbanizado -accesos, alcantarillado, etcétera-, el Ayuntamiento lo saca a subasta pública a 11.000 pesetas metro cuadrado, mientras que el precio de mercado en la zona es de 127.600.

En la zona de Méndez Álvaro-Delicias, el precio de expropiación fue de 16.200 pesetas metro cuadrado. El precio fijado para la futura subasta es de 30.800 pesetas, y el precio a que se venderá por parte de la iniciativa privada, en virtud de los precios de mercado en dicha zona, será de 350.000 pesetas.

"En definitiva", afirmó Herrera, "el Ayuntamiento ha creado un circuito especulativo en el que es el propio Ayuntamiento quien actúa de intermediario, y, además, se encarga de hacer el trabajo sucio. Primero se las entiende con los pequeños propietarios privados de los terrenos y hace frente a las inevitables protestas. Luego adecenta los solares y los dota de todas las condiciones de urbanización para que sean apetecibles para la iniciativa privada, y finalmente, lo vende.

Herrera desmiente la idea que "está vendiendo" el equipo de gobierno municipal de que el Ayuntamiento debe ser el beneficiario de las plusvalías del suelo que generen estas operaciones. "El Ayuntamiento sólo accede a una pequeña parte de esas plusvalías. Otra cosa sería si el Ayuntamiento, a través de empresas mixtas, participara en la construcción de las viviendas o de las oficinas y se quedara con la mitad del beneficio final, por decir una cifra".

Herrera, a través de toda la documentación evaluada, fija en 1.200.000 metros cuadrados el suelo que se va a sacar a subasta al sector terciario -servicios y oficinas-. "Si tenemos en cuenta que la demanda de suelo para el sector terciario es de unos 250.000 metros cuadrados anuales, nos encontramos que las empresas que compren esos 1.200.000 metros monopolizarán el mercado".

Hasta ahora, la única gran operación de suelo que ha salido a subasta ha sido la del Campo de las Naciones, y, como estaba previsto, los precios se han disparado. Si el Ayuntamiento fijó el precio del metro cuadrado urbanizado en 66.000 pesetas, las empresas que litigaron en la subasta han ofrecido entre 163.000 y 235.000, por lo que el precio del metro cuadrado construido que salga al mercado no será inferior a las 500.000 pesetas.