Biografia de una mujer surrealista

Una de las estrellas de la constelación de féminas surrealistas, siempre emplazadas peligrosamente en los bordes de la existencia -mujeres-niñas o femmes fatales-, el talento de Remedios Varo es inseparable de una manera de entender la vida, y sobre todo de vivir. Una vida caprichosa, aparentemente dominada por el vértigo y la audacia, pero a la que sólo es capaz de sobrevivir el más fuerte. Remedios Varo lo era en todos los planos, y también en el del amor o el de los amores -L`amour fou-, ella que intimó afectivamente con Lizárraga, Domínguez, Francés, Péret, Carrington, Nicolle, Gruen...El amor y el compromiso ético a corazón abierto, pero aún nos impresiona más en esta burguesita española, de atractivas facciones, su arrojo estético, que la arrastra mentalmente más allá de cualquier barrera. Hace falta contemplar sus cuadros para valorar la sutileza y el humor con que afrontaba el destino, esa extraña reserva íntima con que se ausentaba de los aconteceres diarios, creando un universo imaginario personal donde cabían por igual la química y la alquimia, lo maquinal y lo cordial.

A este universo nos ha ayudado a penetrar otra mujer -sin olvidarnos de Natacha Seseña, responsable del proyecto y comisaria de la muestra, junto con F. Martín-, su abnegada e inteligente biógrafa, la norteameri.cana Janet Kaplan, que ha sabido reconstruir pacientemente datos y referencias artísticas. Ha sido un total acierto de la Fundación del Banco Exterior haber patrocinado la traducción al castellano de este libro, que se lee con. curiosidad, interés y apasionamiento, porque así fue la intensa y no muy larga vida de Remedios Varo, y así también nos la ha sabido contar Janet Kaplan.