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Presos de concienciaRDA

Sylvia Schmidt

Mecánica de 23 años, de Dresde, cumple una pena de dos años y 11 meses de cárcel por intentar abandonar la República Democrática Alemana (RDA) sin autorización y por pedir tal autorización.Sylvia Schmidt fue detenida en Hungría cuando intentaba cruzar la frontera con Austria. Después, las autoridades húngaras la repatriaron a la RDA, donde se la condenó a prisión por cruzar la frontera ilegalmente", (artículo 213 del Código Penal), pero a finales de 1987 quedó en libertad en virtud de una amnistía. Poco después solicitó autorización para emigrar.

En enero la detuvieron nuevamente, esta vez por "cometer traición transmitiendo información" (artículo 99 del Código Penal), y en abril la condenaron a un año y ocho meses de prisión. Además debe cumplir el resto de su primera pena.

En la RDA, los juicios de este tipo se siguen a puerta cerrada, y Amnistía Internacional desconoce los motivos de la acusación formulada contra Sylvia Schmidt en virtud del artículo 99. Éste prohíbe el envío al extranjero de "información no clasificada como secreta" cuando esto pueda resultar "inconveniente para los intereses" de la RDA.

Según parece, Sylvia Schmidt ayudó a una persona que también deseaba emigrar a escribir una carta a una organización de la República Federal de Alemania. Se cree que este acto y sus propios esfuerzos por obtener la autorización para emigrar motivaron su segunda detención.

Rogamos envíen cartas cortésmente redactadas, pidiendo su libertad inmediata e incondicional, a Erich Honecker, presidente del Consejo de Estado, 102 Berlín, Marx-Engels-Platz, República Democrática Alemana.

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