Las empresas públicas piden instrucciones a Economía para revisar los convenios de 1988

La dirección de las empresas públicas ha pedido instrucciones al Ministerio de Economía para ver si es procedente o no la revisión de los convenios con vigencia para 1988, firmados con aumentos salariales según la previsión de inflación. Quieren saber si se pueden incrementar en dos puntos los salarios, una vez que el Gobierno ha subido del 3% al 5% el índice de precios al consumo (IPC) previsto para final de año. La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), por su parte, no ha tomado una determinación al respecto.

La decisión del Gobierno de subir del 3% al 5% la previsión de inflación para 1988 ha provocado que los sindicatos pidan la convocatoria de las comisiones paritarias de los convenios para proceder a revisar los salarios de este año, con efectos retroactivos desde: el 1 de enero. Sin embargo, existen diferentes interpretaciones sobre los efectos de la revisión del IPC en los convenios pactados con aumentos salariales según la previsión de inflación. Por ello, los responsables de las empresas públicas han pedido instrucciones al Ministerio de Economía para ver si es procedente subir los salarios de este año en dos puntos.En las empresas privadas todavía no se ha tomado una. decisión. El secretario general de la CEOE, Juan Jiménez Aguilar, afirma que se procederá a estudiar las redacciones de los diferentes convenios colectivos.

Si esa subida se lleva a cabo se verían afectados más de tres millones de trabajadores, lo que tendría un considerable impacto en el incremento salarial medio, que, según Economía, es en gran parte responsable de que este año se hayan disparado los precios.

Los sindicatos creen que la revisión de salarlos debe ser automática. Comisiones Obreras ha enviado una circular a sus organizaciones para que convoquen de inmediato a las comisiones paritarias de los convenios y reclamen la revisión salarial -con carácter retroactivo desde el 1 de enero- de ese tipo de pactos, apoyándose en argumentos jurídicos y sindicales. La central prevé que algunas empresas o sectores se nieguen a aplicar los aumentos según la nueva previsión de inflación. Si es así la orden es promover conflictos colectivos o movilizaciones.

También UGT ha dado instrucciones a sus federaciones para que exijan un incremento de dos puntos en los convenios firmados con la inflación prevista y advierte que se establecerán los criterios para negociar cláusulas de revisión que recojan la desviación de los precios.

Las severas instrucciones dadas por la CEOE a las empresas para que no negocien cláusulas de garantía ha derivado en que un reducido número de convenios de 1987 y 1988 las recojan. En estos momentos las tienen apenas un 50% de los trabajadores y son de una gran heterogeneidad. La patronal y los sindicatos aseguran no poseer datos de los convenios con cláusulas tipo ANE, las únicas que garantizan aumentos salariales que recojan la desviación de los precios.

Para Comisiones Obreras uno de los objetivos prioritarios en la negociación colectiva de 1989 es la universalización de esas cláusulas, dado que considera absolutamente irreal la previsión de inflación para el próximo año, fijada por el Gobierno en el 3%.