Las reservas se elevaron en 749 millones de dólares en agosto

La salida de capitales -en mayor medida de dinero especulativo o a corto plazo, pero también el invertido en las bolsas y en inmuebles- volvió a frenar el aumento de las reservas españolas de divisas durante el pasado mes de agosto, según se desprende de los datos del registro de caja del Banco de España. Para los mercados monetarios, que ayer empezaban a descontar una evolución de los precios al consumo nada favorable en septiembre y encarecieron las operaciones distintas a las de intervención oficial un cuarto de punto adicional al punto del viernes último, estas cifras tampoco entrañan buenos presagios respecto a las posibilidades del control monetario.En efecto, el retorno de capitales a sus países de origen, fenómeno que en julio y agosto permitió al Banco de España un aparente control de la cantidad de dinero en circulación para cegar las vías monetarias al aumento de los precios, parece que empezó a debilitarse a finales de agosto. La posterior subida de los tipos de interés españoles, la menor fortaleza del dólar y la apreciación de la peseta pueden desanimar tales salidas o incentivar las entradas. Esto dificultaría el control monetario ahora que vuelve a ser esgrimido como principal arma en la lucha contra la inflación, según comentaban algunos operadores al conocer los datos.

Nuevo superávit corriente

Las cifras publicadas ayer indican que las reservas de divisas aumentaron 749 millones de dólares (unos 90.000 millones de pesetas), el 13% menos que en agosto de 1987. El freno, menor que en julio por haber aflojado las salidas de capitales, se produce pese a la vuelta a un superávit por cuenta corriente que había desaparecido en los primeros meses del año. Ahora, en agosto, las entradas por turismo compensaron de nuevo un déficit comercial contenido desde el verano.El déficit comercial apenas ha crecido en agosto un l8,8%; las entradas de dinero por exportaciones aumentaron algo más (un 29,4%) que las salidas por importaciones (26,2%). Para los ocho primeros meses del año, sin embargo, el déficit sigue todavía un 47% por encima del año pasado; los ingresos por ventas al exterior aumentaron un 23,6% y los pagos por compras el 28,7%.

Pero en agosto los ingresos por turismo han subido un 18%, hasta 1.743 millones de dólares, después de descontar pagos por 1.383, en los cuales el crecimiento supera el 30%. Esto ha compensado tanto el déficit comercial como el deterioro del saldo de rentas privadas, causado básicamente por el aumento de casi un 47% (para agosto y para todo el año) en la repatriación de beneficios obtenidos en España por las empresas extranjeras.

Ya en la balanza de capitales a largo plazo (más de un año), el superávit de agosto se redujo a 597 millones de dólares (unos 72.000 millones de pesetas), casi la mitad que en el mismo mes de 1987. Hubo reducción de créditos extranjeros, recuperación del aumento de las inversiones directas y nuevos retrocesos en las inversiones en inmuebles y en carteras bursátiles. Pero la menor entrada neta ha sido contrarrestada por las salidas a corto plazo, unos 51.000 millones de pesetas en agosto, mes que en 1887 registró entradas netas por más de 25.000 millones.