Los grandes industriales reabren la 'guerra del pan'

Los panaderos de Madrid han reanudado las hostilidades de la denominada guerra del pan. Pero ahora, al contrario que en el mes de julio, fecha de la primera batalla, los precios registran una tendencia al alza. El secretario general de la Asociación Provincial de Fabricantes Expendedores de Pan de Madrid (Asempan), Felipe Ruano, reconoce que los precios de este producto de primera necesidad han subido entre el 4% y el 5%. La clásica pistola puede comprarse entre 20 y 35 pesetas en comercios muy cercanos entre sí.

El incremento del coste de las materias primas, la harina fundamentalmente, y el régimen de libertad de pesos y precios podría ser el origen de la subida del pan. Sin embargo, para Luis Montalvo, presidente de la Asociación de Expendedores Autónomos de Pan y Bollos de Madrid, la subida es "una táctica más dulce de la guerra del pan, que nunca se terminó".La subida de los precios del pan empezó a finales del pasado mes de julio, cuando la Administración decidió terminar con la tendencia a la baja de los precios que originó la guerra del pan. No era más que una lucha entre los grandes fabricantes para acaparar un mercado en el que se vende diariamente medio millón de kilos de pan. Las inspecciones y los controles de calidad en las 250 panificadoras y los 11.000 puntos de venta existentes acabaron con la bajada de los precios.

Felipe Ruano afirma que era lógico que, una vez que se terminara con la bajada continua de precios, éstos volvieran a subir. Matías Morales, propietario de la panificadora Dulcicrem y uno de los industriales que estuvieron en el origen de la anterior guerra, considera que "la subida se ha notado más porque la bajada de meses anteriores fue un disparate".

Pero lo que sigue existiendo es una gran disparidad de precios. Mientras una gran cadena de alimentación vende el pan a unas 21 pesetas, en panaderías próximas a sus establecimientos se vende a 25, 30 y hasta a 35 pesetas. Esta diferencia tiene distinto origen, según de donde venga la explicación. Ruano y Morales coinciden en que se ha producido un efecto psicológico entre la clientela, que considera que el pan más caro es mejor. Ricardo Lozano, secretario general de la Unión de Consumidores de Madrid, cree que los altibajos son normales, dentro de unos límites, "debido a la libertad de mercado". Luis Montalvo cree que el origen está "en una ofensiva de los grandes fabricantes para acabar con los pequeños y con algunos vendedores".

Morales y Ruano coinciden al afirmar que la subida de la harina y los nuevos convenios colectivos son las únicas causas de la subida. Montalvo, por el contrario, resta importancia a la harina, "que suele ser de mala calidad", dice, y afirma que la subida, que se niega a aceptar, "es un signo evidente de la competencia desleal del sector, que en algunos casos mantiene actitudes mafiosas".