EL FMI considera mínimos los efectos del "crash" de octubre

El Fondo Monetario Internacional (FMI), en su informe anual hecho público ayer, considera que los efectos del crash bursátil de octubre de 1987 fueron mínimos y que la economía mundial prosiguió su tendencia al crecimiento en dicho año y primer semestre de 1988, al menos en los países industrializados y en algunos en desarrollo."El producto y el comercio mundiales siguieron acusando la tendencia expansiva anterior y la inflación se mantuvo en un bajo nivel", según el texto del informe, que añade que los países industrializados mantuvieron su tendencia al ajuste económico, con resultados positivos pese a las variaciones que se produjeron en los tipos de cambio.

Para los países en desarrollo, sus dificultades de balanza de pagos se aliviaron, en cierta medida, en 1987 gracias al crecimiento de sus exportaciones. No obstante, los resultados en dichos países fueron desiguales.

El informe del FMI muestra, sin embargo, una preocupación creciente por los impagos en los servicios de la deuda de algunos países deudores, que a fecha de abril de 1988 se elevaban a 2.500 millones de dólares.

Por otro lado, las empresas españolas doblaron prácticamente su participación en proyectos del Banco Mundial en el ejercicio de julio de 1987 a julio de 1988, hasta totalizar 127 millones de dólares (15.875 millones de pesetas), según informó en Madrid Oliver Lafourcade, representante en Europa del organismo internacional.

Durante el ejercicio anterior, la participación de empresas españolas en distintos proyectos fue de 75 millones de dólares, pero una amplia campaña del Banco Mundial en nuestro país para estimular la entrada de empresas españolas de proyectos en el Tercer Mundo tuvo un amplio efecto, que hizo que prácticamente se doblara el interés español.

Lafourcade, que presentó en Madrid el informe anual del Banco Mundial que será hecho público el próximo día 19, resaltó como aspectos más importantes del ejercicio pasado la decisión del organismo con sede en Washington de aumentar su capital social en 75.000 millones de dólares, lo que supone prácticamente doblar sus recursos propios. Esto permitirá al Banco Mundial incrementar, probablemente, el nivel de préstamos que, a un interés no superior al 7,5% anual, concede a los países más necesitados del planeta para proyectos concretos. En el pasado ejercicio, el volumen de créditos concedidos por el Banco Mundial ascendió a 11.600 millones de dólares, a los que hay que sumar los 3.400 millones de la Agencia Internacional del Fomento.