_
_
_
_

Ben Alí insiste en París en la cooperación entre el Magreb y la CE

Lluís Bassets

El presidente de la República de Túnez, Zin el Abidin Ben Alí, autor del golpe de Estado constitucional que depuso a Habib Burguiba en noviembre de 1987, se mostró partidario durante el viaje oficial a Francia, que termina hoy, de "favorecer una cooperación global entre la Comunidad Europea" y la comunidad del Magreb, actualmente objeto de intensos contactos bilaterales entre todos los países norteafricanos.El viaje de Ben Alí a Francia es el primero que realiza fuera del mundo árabe y africano y se ha convertido en el reconocimiento de la voluntad democratizadora existente en Túnez y en la presentación internacional de este general reformador.

Ben Alí firmó antes de salir hacia París la legalización de dos nuevos partidos de oposición, uno de izquierdas, La Unión Socialista Progresista, y otro liberal, el Partido Social para el Progreso, y anunció en sendas entrevistas a Le Monde y Le Nouvel Observateur la celebración de elecciones legislativas y presidenciales en noviembre de 1989. En ambas entrevistas Ben Alí se manifestó contrario a la pena de muerte, que ha dejado de aplicarse desde su llegada a la magistratura suprema tunecina.

El presidente de la República Francesa, François Mitterrand, en su discurso de bienvenida, subrayó que Ben Alí "había garantizado el cambio dentro de la continuidad en Túnez" y exhortó a los empresarios franceses para que invirtieran en el país norteafricano.

Uno de los objetivos del primer viaje de Ben Alí a Europa es recuperar el terreno perdido en los últimos años de la presidencia vitalicia de Habib Burguiba, en los que Túnez perdió muchas oportunidades comerciales y económicas. Citando palabras de un sociólogo tunecino, Ben Alí ha declarado en París que deseaba evitar en su país "la oposición entre dos culturas principales, una modernista, sin verdaderas raíces nacionales y populares, en clara pérdida de velocidad, y una cultura auténtica, sostenida por las masas pequeñoburguesas, en expansión continua, pero mirando al pasado, ignorante de las necesidades del presente y del futuro".

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_