Museos a medio gas

Pasan calor y penurias. La escasez de personal es la causa principal de las deficiencias de los cuatro museos que dependen del Ayuntamiento. Así lo reconocenlos principales responsables del Museo Municipal, cuya directora, Mercedes Agulló, tiene bajo su responsabilidad el funcionamiento de todos estos centros. El templo de Debod está sometido a un grave deterioro; el Museo Municipal cierra en agosto; el de escultura al aire libre sufre constantes agresiones de gamberros; la ermita de San Antonio de la Florida sólo abre 33 horas semanales en verano.

El Museo Municipal, encargado de documentar la historia de Madrid, podría ser una buena fuente de conocimiento para los forasteros que visitan la ciudad durante el verano. Sin embargo, desde hace cuatro años cierra durante el mes de agosto a causa de la falta de personal de vigilancia y la carencia de aire acondicionado. Fernando Delgado, secretario técnico del museo, no da rodeos: "Nos vemos obligados a seguir unos criterios irracionales de cierre".El área de Cuitu7a del Ayuntamiento pretende que el próximo año el museo no cierre. José Antonio Muñoz., de los Servicios Culturales, afirma que, cuando se tralade la Biblioteca Municipal. al cuartel del Conde Duue, se podrá añadir al museo el espacio que ésta ocupa ahora, se podrá acometer la instalación de aire acondicionado y se abrirá todo el verano".

Ahora, las elevadas temperaturas suponen una fuerte agresión para los objetos que se exponen. El Museo Municipal cuenta con 33.500 objetos, de los que se muestra al público una quinta parte. La atención a los investigadores queda restringida sólo a los lunes y jueves.

La plantilla de los museos está compuesta por la directora y 2 restauradors,8 ayudantes y 3 administrativos más oficiales de asistencia interna y ceremonial, 4 orderia rizas y 23 vigilantes en el Mn seo IMI unicipal, 3 en el templo de Debod y 4 en la ermita de San Antonio. El año pasado visitaron los museos munícipales cerca de 38.000 personas.

Fernando Delgado reconoceque también esta vigilancia deficiente es la causa de que los milenarios bloques del templo de Debod no escapen a la agresión de los grafitos.

Deterioro del templo

En el último número de la Revista de Arqueología se se-fíala con detalle cómo este monumento sufre un grave y acelerado detenoro desde que fue colocado, a principios de los años setenta, en el parque del Cuartel de la Montaña. "U.bicar un templo concebido para un ambiente árido/tropical en una zona de chma continental riguroso como Madrid no era una decisiónacertada si no se tomaban medidas complementarias". "Otros países receptores (RFA, Italia, Holanda y Estados Unidos) han ubicado los bienes arquitectónicos recibidos de Egipto dentro de museos arqueológicos".

Pero no sólo los factores climatológicos y la contaminación amenazan al templo. "Una política de promoción del edificio mal concebida", continúa la publicación, "así como un uso irresponsable del templo han causado daños importantes".

Las actividades culturales que se organizaban en el templo se han trasladado este año al recinto de la Muralla Árabe. Ésta, según José Antonio Muñoz, "reúne mejores condiciones para los espectáculos y apenas sufre deterioro". Los motivos para abandonar las actividades en el edificio egipcio han sido fundamentalmente dos: "Acabar con la erosión que ocasiona el montaje de escenarios, luces y otros artilugios, y evitar que los espectadores pasen frío".

Por las mentes de los técnicos del Ayuntamiento de Madrid han pasado además ideas espectaculares para proteger las piedras de Debod. La más llamativa, sobre la que ya hay varios estudios realizados, consistiría en recubrir- todo el teniplo con una cápsula de metacrilato o cristal, que evitaria el deterioro ambiental.