Àlbum real

La familia real española y los príncipes de Gales, acompañados por sus dos hijos, posaron ayer en el palacio de Marivent, en Palma de Mallorca, ante medio centenar de reporteros que representaban a los más importantes medios de comunicación de España y el Reino Unido. La sesión, a la que asistieron los nueve miembros de ambas familias, fue más ordenada que la del pasado año, en la que se registró todo tipo de problemas entre los organizadores del acto y los reporteros. La casa real restringió ayer la entrada a Marivent y todo fue mucho más relajado.

Al concluir la sesión don Juan Carlos comentó a los redactores gráficos si podía contribuir a mejorar las condiciones de su trabajo. En Palma de Mallorca hay en estos momentos 250 reporteros cubriendo la información que genera el descanso del Rey, su familia y sus invitados.El retrato de familia fue completo. El rey Juan Carlos, la reina Sofía, el príncipe Felipe, las infantas Elena y Cristina, los príncipes de Gales, Carlos y Diana, y sus dos hijos, Guillermo y Enrique, posaron juntos, y el álbum de fotos y retratos reales de Marivent pudo completarse al fin. La familia real española y sus invitados salieron al porche del palacio de Marivent a las 9.55 horas. Una nube de reporteros, que poco antes habían sido registrados por los miembros de seguridad de la casa real, comenzaron a disparar sus cámaras. Delante de ellos, a muy pocos metros, estaban la princesa Diana y sus dos hijos, que una vez más se erigieron en el imán de los teleobjetivos. La princesa de Gales vestía una blusa blanca, una falda roja, unos zapatos también de color blanco con tacón corto y dos enormes pendientes circulares. La princesa tardó en sonreír, pero cuando lo hizo la escena dejó de ser fría.

Vestuario

Doña Sofía eligió una blusa y unos pantalones de color verde oscuro para posar ante la Prensa, mientras que el Rey llevaba una camisa estampada de tonos grises, y el príncipe Carlos, heredero de la corona británica, una azul celeste.El encuentro con los periodistas apenas se prolongó durante cinco minutos. Y según uno de los fotógrafos que asistió a Marivent, "ha sido un poco sosa hasta que el Rey ha cogido por los brazos al príncipe Guillermo [de seis años de edad] y lo ha sentado sobre sus piernas".

Fueron precisamente los hijos de Carlos y Diana quienes dieron por terminada la sesión al levantarse y dirigirse hacia la puerta del palacio seguidos por las infantas Cristina y Elena y el príncipe Felipe. El Monarca español se reunió brevemente con varios periodistas para interesarse por su trabajo. El Rey les pidió unas sugerencias para poder facilitar su tarea. El Rey lamentó que la entrada de los príncipes de Gales en el palacio de Marivent el pasado jueves -tras tomar tierra el avión que les trasladó desde el Reino Unido a Palma de Mallorca- fuera tan rápida. Don Juan Carlos en su diálogo con los fotógrafos escuchó como algunos de estos le propusieron hacer fotos en la piscina de Marivent o a bordo del yate Fortuna. El Rey dijo que en el primer caso el lugar es de reducidas dimensiones y comentó, en el segundo caso, que si dejaba a algún periodista en tierra esto probablemente le provocaría problemas.

Avería en el 'Fortuna'

Poco después, don Juan Carlos, el príncipe Carlos, Constantino de Grecia y don Felipe, príncipe de Asturias, embarcaron en el Fortuna, y salieron a mar abierto. Una avería, localizada en el sistema eléctrico de la nave según los primeros datos, obligó al Fortuna a dirigirse al puerto de Soller, al noroeste de Mallorca. Desde la propia embarcación se dieron instrucciones a Marivent para organizar un dispositivo de traslado por carretera del Rey y sus invitados a Palma. El Fortuna, que regresó por sus propios medios a puerto, permanece amarrado en Soller, donde un destacamento de la Armada se encarga de su custodia. El capitán del yate real, el británico Richard Cross, también se encuentra junto al Fortuna para dirigir los trabajos de reparación.En principio, este incidente podría alterar el programa de actividades de los príncipes de Gales en Mallorca. Según medios próximos a los representantes del palacio de Buckingham en Mallorca, la familia del heredero de la Corona británica podría abandonar España antes de lo previsto, y viajar a Escocia el próximo martes para reunirse con la familia real británica,que celebra el nacimiento de la hija de Sarah Ferguson y el príncipe Andrés.

Por su parte, doña Sofia y Diana de Gales volaron a Gerona para asistir al concierto de José Carreras en el castillo de Perelada. Ambas fueron recibidas por el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol.