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Serra explica ante la UEO su política de industria militar

Lluís Bassets

El ministro de Defensa español, Narcís Serra, intervino ayer ante la 34º Asamblea Parlamentaria de la Unión de Europa Occidental (UEO), en su calidad de presidente del Grupo Europeo Independiente de Programas (GEIP), para explicar al organismo europeo de defensa sus planes en política de industria militar. Serra es el primer ministro de Defensa español y el primer presidente del GEIP que interviene en la asamblea de la UEO. Su discurso coincide con el inicio de las conversaciones entre España y Portugal y representantes de los siete países miembros de la UEO para su incorporación al organismo en una fecha que todavía no ha sido precisada.

El ministro español quiso puntualizar que su presencia ante los parlamentarios de la UEO no tiene nada que ver con la apertura de las conversaciones para la ampliación del organismo, pero en su discurso quiso congratularse de ello. "El Gobierno español ha comunicado a la UEO que la política española de defensa es acorde con los principios de la plataforma de La Haya", aseguró Serra al término de su intervención en una conferencia de prensa, en referencia a la reactualización de los principios de la organización, realizada en 1987, en la que se señalan reservas respecto a los países que cuentan con prohibiciones al tránsito de armamento nuclear y a los países que cuentan con contenciosos fronterizos.España podría incurrir en ambas reservas, como consecuencia de las condiciones de permanencia en la OTAN aprobadas en referéndum y de la reivindicación de la soberanía sobre el Peñón de Gibraltar. Respecto al tránsito de armamento nuclear, Serra se limitó a asegurar que, "puesto que España no es un país que tenga o vaya a tener armamento nuclear, no hay objeto de discusión, sino únicamente de aclaraciones por cada una de las partes". Respecto al Peñón, el ministro aseguró que "España debe tomar las medidas de salvaguarda para que la reivindicación de la soberanía sobre Gibraltar no quede afectada".

Narcís Serra, cuarto presidente del organismo de coordinación de la política industrial militar europea, desarrolló ante los parlamentarios de la UEO los principales objetivos del GEIP, entre los que mencionó la creación de un mercado europeo de industrias de defensa, el desarrollo de las industrias de los países menos desarrollados y la promoción de la investigación a través de un organismo europeo destinado a coordinar y optimizar los trabajos realizados hasta ahora por los distintos países.

Definió también como principal propósito del GEIP "el reforzamiento de la base industrial y tecnológica europea en el ámbito de la defensa para aumentar su eficacia y competitividad". El GEIP fue creado en 1976 sin participación de los dos países americanos de la Alianza, EE UU y Canadá, y con plena participación de Francia, que no está integrada en la organización militar de la OTAN. El grupo dedica sus esfuerzos únicamente al armamento convencional, circunstancia que Serra tuvo que aclarar a petición de un parlamentario de la RFA, interesado por su posición respecto a este tipo de armamento sta fue la única pregunta planteada al término del discurso de Serra, pronunciado ante un cortés hemiciclo semivacío que aplaudió educadamente cuando subió a la tribuna y cuarido terminó su discurso.

El ministro español se entrevistó por la mañana con su colega francés, el nuevo ministro socialista Jean-Pierre Chevénement. "Los trabajos que habíamos realizado con el anterior Gobierno", aseguró, "pueden ser utilizados ahora con un horizonte más largo". Serra desmintió que con ello significara que el anterior Gobierno conservador francés no tenía posibilidades de trabajar a largo plazo en su colaboración bilateral con España.

Serra y Chevénement volverán a reunirse dentro de un ines. "Estudiaremos la posición del Gobierno francés en la cuestión de la defensa europea", dijo. Serra citó la cooperación tecnológica e industrial en materia militar, la cooperación mediterránea y la participación española en el proyecto de satélite espía francés.

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Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

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