Un agente de aduanas, implicado en la red que guardó 1.000 kilos de cocaína en Irún

Un agente de aduanas de Irún, Javier Lecuona Aldanoindo, de 43 años, es uno de los cuatro detenidos en la operación policial desarrollada en la tarde del sábado en aquella localidad guipuzcoana que permitió la incautación de una tonelada de cocaína, el mayor alijo de esta droga aprehendido en Europa. Lecuona es el propietario de la lonja en que fueron descubiertos los 1.000 kilos de cocaína.

Fuentes policiales consideran que la cocaína estaba destinada a su distribución en el mercado español y en algunos países europeos. Estas fuentes agregaron que parte de la droga iba a ser introducida en Europa en camiones TIR, camuflada en cajas de botellas de vino.Según la policía, los detenidos integraban el núcleo de una red de narcotraficantes con ramificaciones en Europa, cuyos jefes se desconocen, y estaban encargados de la distribución de la droga.

Los restantes detenidos son el colombiano Julián Giraldo Martínez, de 33 años; el español residente en el sur de Francia José Tortosa Martínez, de 49, y la esposa de este último M. T. A. M. , de 44. Todos ellos permanecían ayer en la comisaría de San Sebastián, según informa José Luis Barbería.

Las fuentes policiales informantes estiman que la cocaína procedía de Colombia y fue transportada por mar en un barco cuyo nombre no ha trascendido hasta un puerto cercano a Irún, probablemente el de Fuenterrabía, desde donde fue llevada a la localidad fronteriza. Estas fuentes no quisieron concretar cuánto tiempo llevaba el alijo guardado en la lonja donde fue descubierto. La policía desarrolla. ahora comprobaciones sobre la red de la que formaban parte los arrestados.

El 'cártel de Medellín'

El gobernador civil de Guipúzcoa, José Ramón Goñi Tirapu, declaró ayer que la red descubierta el sábado en Irún tiene relación con el llamado cártel de Medellín (Colombia). En una conferencia de prensa celebrada en San Sebastián, el gobernador consideró el descubrimiento de los 1.000 kilos de cocaína "el mayor golpe dado en Europa a los narcotraficantes".La cocaína incautada es de gran pureza, según los expertos de la policía. Los investigadores calculan que, una vez adulterada y distribuida, el alijo se hubiera convertido en el mercado clandestino en unos 50 millones de dosis. El valor de la droga incautada podría aproximarse a los 15.000 millones de pesetas.

La operación ha contribuido, añadió Goñi Tirapu, a la desarticulación de una red de tráfico ilegal en Europa, directamente relacionada con los centros de producción y distribución inicial de la droga en Colombia.

La primera pista la obtuvo la policía al identificar hace algún tiempo al colombiano Julián Giraldo. Los investigadores descubrieron que el sospechoso entraba en relación con José Tortosa y con el agente de aduanas.

El alijo se encontraba oculto en el altillo de una lonja, propiedad de Javier Lecuona, sita en la calle de Peio Bixente, en el barrio de San Miguel, de Irún. La droga estaba distribuida en paquetes de plástico prensados y tapados con trapos. La policía sospecha que la presencia de la droga en esa localidad se debe a la facilidad de transporte hacia Europa que ofrece el tráfico marítimo costero en las proximidades de la frontera.

Con la tonelada aprehendida el sábado en Guipúzcoa se eleva a 2.000 kilos, aproximadamente el volumen de las partidas de cocaína decomisadas por la policía española en los últimos 45 días. Según fuentes oficiales, esta cifra es similar a las capturas de la misma droga en toda Europa el año pasado.

[Por otra parte, cuatro personas, cuyos nombres no han sido revelados, han sido detenidas en Valencia por su presunta relación en una operación de narcotráfico desarticulada el sábado. La policía abrirá a las 10 de esta mañana un camión frigorífico, capturado el sábado en un almacén situado entre las poblaciones de Manises y Ribarroja, que contiene, según fuentes policiales, más de 500 kilos de hachís en un doble fondo].