Barrionuevo, partidario de proseguir los contactos con ETA

, El ministro del Interior, José Barrionuevo, afirmó ayer ante la comisión de justicia e interior del Congreso de los Diputados que "no se ha producido una renuncia a contactos" con la organización terrorista ETA para conseguir que sus integrantes abandonen la violencia. Barrionuevo hizo esta advertencia tras precisar, en relación con el frustrado diálogo iniciado en Argel con dirigentes de la organización terrorista, que el Gobierno "siempre ha considerado que había un alcance limitado para esos contactos porque no había una verdadera voluntad de dejar la violencia por parte de los terroristas. Siempre han intentado imposiciones inadmisibles", apostilló. En la sesión se produjeron varios enfrentamientos verbales del ministro con los diputados.

El diputado de IU, Enrique Curiel, opinó ante: Barrionuevo que la operación de registros domiciliarios practicado por la policía en Alcorcón (Madrid) supuso "una reacción sincopada ante la incapacidad política de las autoridades del Ministerio del Interior respecto a los problemas de inseguridad ciudadana" y respondió "más a una operación de imagen" que a pistas solventes para descubrir el paradero de Emiliano Revilla, secuestrado por ETA. José Barrionuevo sostuvo que esta intervención policial, así como otras semejantes "fueron alentadas o apoyadas por las personas que tenían que sufrir las molestias".

Aplicación de la ley

En su última comparecencia obligada ante esta comisión para informar de la aplicación de la ley antiterrorista -la derogación de ésta se encuentra pendiente de la tramitación en el Senado de la reforma de la ley de Enjuiciamiento Criminal y del Código Penal-, el ministro del Interior señaló que desde finales de septiembre del año pasado la policía ha detenido a 299 miembros de ETA, reveló que en el 21% de las detenciones realizadas al amparo de esta legislación fueron utilizadas las prerrogativas para dilatar los interrogatorios más allá de las 72 horas permitidas por la Constitución. Si bien Barrionuevo señaló que el 69% de los detenidos fueron puestos a disposición judicial, rehuyó revelar en cuántos casos prosiguió el procedimiento judicial. Barrionuevo indicó que en este momento la policía mantiene controladas las comunicaciones postales de una persona y tiene autorización para tener intervenidos los teléfonos de 141 abonados.

Especialmente críticos con la ley antiterrorista se mostraron los diputados Juan María Bandrés (Euskadiko Ezkerra) y Joseba Azkarraga (Eusko Alkartasuna). Bandrés resaltó que la ley antiterorista no va a desaparecer en la medida en que sus aspectos más importantes van a ser trasladados a la legislación ordinaria y Azkarraga afirmó que ésta ha sido una ley nefasta, "impropio de un Estado de derecho" y que ha producido más perjuicios que beneficios para terminar con el terrorismo.

No sin cierta ironía, Barrionuevo le agradeció que considerase a ETA como un estorbo para el pueblo vasco, del mismo modo que se felicitó del apoyo expresado por Curiel a la colaboración ciudadana con1a policía en la lucha antiterrorista. Azkarraga consideró incluso ofensivo el comentario de Barrionuevo.

Momentos de tensión

A lo largo de las cuatro horas de comparecencia de Barrionuevo en la Comisión de Interior, se produjeron varios momentos de tensión. El ministro del Interior- comentó en una ocasión que "ante tan enjundiosas manifestaciones" de la oposición de izquierda prefería permanecer callado, a lo que inmediatamente respondió Bandrés con una renuncia a formular preguntas "por la notoria falta de interés jurídico y político de las respuestas del ministro", en relación con la operación de registros domiciliarios llevada a cabo por la policía en Alcorcón.

En otro momento, Barrionuevo acusó a Bandrés de "excesiva distancia entre su lenguaje, en privado y en público", lo que le llevó a éste a revelar los término s de un almuerzo mantenido en el Ministerio del interior cuando se encontraba en preparación la reforma de la Ley de Enjuiciamieto Criminal. El representantes de Euskadiko Ezkerra ironizó, por su parte, al asegurar que había felicitado al ministro por las mejoras en la gastronomía de su departamento y expresado su apoyo a algunas rectificaciones de la ley antiterrorista, pero sin comprometer un apoyo a los proyectos legislativos alternativos que preparaba el Gobierno.

En cuanto al tema de las escuchas telefónicas efectuadas al director general de Asuntos Consulares, Rafael Pastor Ridruejo, Barrionuevo protagonizó en su respuesta al diputado Enrique Curiel el primer enfrentamiento de la jornada, al responder con evasivas a la pregunta y afirmar que la investigación continúa.