_
_
_
_
_

La Generalitat cuestiona en el último momento la venta de Corberó-Domar a Electrolux

Enric González

La Dirección General de Industria de la Generalitat ha puesto en cuestión en el último momento la venta de las empresas catalanas de electrodomésticos Corberó y Domar, actualmente de su propiedad, al grupo sueco Electrolux, primera firma mundial del sector. A falta de una semana para que Electrolux se haga con el capital de ambas firmas, según lo estipulado en un contrato firmado el pasado diciembre, la Generalitat ha notado "indicios preocupantes" en la actitud de la multinacional, la cual se declara a su vez "absolutamente sorprendido por ello.

El presidente de Ibelsa-Zanussi y, máximo representante de Electrolux en España a través de Electrolux Holding, SA, Julián Massa, y el director general de Industria de la Generalitat, Josep Piqué, se reunieron ayer por la noche en una cena que, según todas las fuentes consultadas, debía ser definitiva para que el acuerdo llegara a buen puerto o, por el contrario, se rompiera in extremis.

Denuncia de CC OO

Hace unas semanas, el sindicato Comisiones Obreras del Baix Llobregat (mayoritario en Corberó-Domar) expesó su preocupación por el hecho de que Electrolux no hubiera definido sus planes para el futuro de las empresas catalanas. Posteriormente acusó a Electrolux de "deteriorar voluntariamente" las factorías de Corberó-Domar, escudándose en la huelga de una compañía fabricante de evaporadores para frigoríficos. Según CC OO, mientras las fábricas de Electrolux habían previsto la huelga y habían almacenado evaporadores, las firmas catalanas no sólo no almacenaron sino que cancelaron sus contratos de suministro.Ante estas acusaciones de CC OO, Piqué se comprometió ante el sindicato a no vender las acciones de Corberó "si Electrolux no define claramente sus planes", según confirmaron ayer en la Generalitat. Piqué añadió que, de no definirse Electrolux, se buscaría un nuevo socio multinacional para garantizar el futuro del grupo catalán de electrodomésticos.

Fuentes de Electrolux manifestaron ayer su "absoluta sorpresa" por la actitud de la Generalitat y añadieron que "las líneas generales de nuestros planes para Corberó-Domar han sido ya expuestas públicamente; como es lógico, no podemos dar pormenores hasta no ser propietarios de estas empresas". También afirmaron que "el contrato firmado con la Generalitat se ha cumplido totalmente".

El acuerdo entre la Generalitat y Electrolux supuso el punto final a más de dos años agónicos para el sector catalán de electodomésticos de línea blanca (cocinas, frigoríficos, calentadores, etcétera). Las empresas del sector, agrupadas en el grupo Paínsa (Corberá, Domar-New Pol y Nueva Bru), tuvieron que ser absorbidas por la Generalitat tras una larguísima crisis.

Tras lograr medidas éspeciales de reconversión y aplicarlas al grupo (con una reducción de plantilla que causó 1.200 despidos y dejó el número de trabajadores en 1.030), se alcanzó el acuerdo con Electrolux, que en España ya poseía la empresa Ibelsa, heredada indirectamente por la compra de Zanussi. La venta a Electrolux fue bendecida por el Consejo de Ministros del pasado 29 de diciembre, quien dio su autorización a la transacción. Ésta debía efectuarse en las juntas de accionistas convocadas para los próximos 29 de abril y 9 de mayo, tras una reducción del capital y posterior ampliación, a cubrir por el grupo sueco a razón de 1.100 millones de pesetas en efectivo, más otros 1.300 millones en concepto de asunción de deudas.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_