Felipe González expresa en Noruega su deseo de llegar a una Europa unida

El presidente del Gobierno, Felipe González, expresó ayer su deseo de llegar a una Europa unida mediante la formación de una sola organización que fuese la suma de la CE y la EFTA (Asociación Europea de Libre Cambio). Como principal conclusión de su visita a Noruega, que finaliza hoy, González ofreció a la primera ministra, Gro Harlem Brundtland, aprovechar que el próximo 1 de enero ambos países comienzan a presidir respectivamente la CE y la EFTA para llegar a acuerdos de colaboración con la vista puesta en una futura unidad. Antes de su regreso, González invitó a la primera ministra a visitar Madrid.

"Hoy en día Europa camina hacia una creciente unión en torno a distintos núcleos que se aproximan entre sí", dijo anoche González, en la cena oficial que le ofreció el matrimonio Brundtland. "La CE y la Asociación Europea de Libre Cambio (EFTA), a la que Noruega pertenece desde su creación, no tienen por qué ser caminos opuestos; son caminos distintos que algún día, así lo esperamos, convergerán en una Europa cada vez más amplia y más unida".El tema CE-EFTA, sin duda el de mayor importancia abordado en la parte oficial de la visita -de González a Noruega, también fue tratado por Gro Harlem en su brindis de la cena de anoche: "Durante la época de presidencias paralelas de la CE y la EFTA esperamos por parte noruega que un estrecho contacto con España pueda generar aportaciones importantes a la labor a favor de un espacio económico europeo", dijo. El propio líder de la oposición noruega, el conservador Kaare Willoch, pronosticó ayer, tras un encuentro de una hora con González y los miembros de la comisión de exteriores del Storting (Parlamento), que este país se replanteará de nuevo su entrada en la CE y "será miembro de la misma, aunque no puedo decir la fecha".

Las contradicciones en la marcha hacia un mercado único europeo fueron ampliamente tratadas por los jefes de gobierno de dos países periféricos con intereses distintos, pero que según dijo González, "se van acercando notablemente". Es paría quisiera una política de cohesión no sólo en el terreno industrial, como pretende No ruega, sino también en el agrícola y en el pesquero, cuestión esta última ante la que el Gobierno de Gro Harlem se muestra reticente. La etapa de la presidencia española de la CE se aprovechará, dijo un miembro del séquito de González para intentar aproximaciones entre las tesis de los países del sur de la CE y la EFTA precisamente en los terrenos agrícola y pesquero.

González también trató, en sus encuentros ayer con la primera ministra y el líder de la oposición, sobre la situación de España en la OTAN -el propio Willoch se mostró comprensivo ante la "especial" posición de nuestro país en la Alianza- y sobre Oriente Medio: acerca de este punto, el conservador Willoch se mostró de acuerdo en la necesidad de apoyar al laborista Simon Peres en su búsqueda de paz.

Entre los avances registrados en las cuestiones bilaterales a raíz de esta visita se destaca la "buena marcha" de las negociaciones para lograr que la empresa Dragados cierre un contrato para instalar una plataforma petrolífera en el mar de Noruega, y la empresa gallega Astano construya dos buques de perforación para este país. Expertos económicos que acompañan a González en este viaje señalaron que la firma de un contrato con empresas noruegas para suministro de gas a España a partir de 1996, firma efectuada el pasado viernes, "abre posibilidades insospechadas" para un aumento del volumen de los intercambios con Noruega.